Tensión política

El retorno del diputado condenado por violencia conyugal causa malestar en Francia

Adrien Quatennens, el otrora delfín del líder de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon, vuelve a ser del partido LFI, con la oposición de los aliados socialistas y ecologistas

Adrien Quatennens.

Adrien Quatennens. / EP / THOMAS SAM

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El regreso del diputado Adrien Quatennens a su grupo parlamentario cuatro meses después de ser condenado por violencia contra su esposa creó este martes malestar en Francia, incluso entre los miembros de su partido La Francia Insumisa (LFI). El diputado, considerado durante mucho tiempo el delfín del líder fundador de la izquierda radical LFI, Jean-Luc Mélenchon, fue condenado en diciembre por violencia doméstica en 2021 y por el envío "regular y malintencionado de mensajes" en 2022. El caso del político de 32 años, otrora cara visible de LFI en platós de televisión y emisoras de radio, sacudió el partido, que había convertido la lucha contra la violencia machista en una de sus prioridades.

"Hubo una votación. La decisión es reintegrar a Adrien Quatennens", anunció la diputada Alma Dufour, una resolución considerada inaceptable por sus aliados socialistas y ecologistas en el seno de la alianza de izquierdas Nupes. "¡Qué vergüenza!", tuiteó la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, que forma parte del sector crítico del Partido Socialista con la alianza Nupes. "Es un error político", abundó la formación socialista en un comunicado.

LFI había expulsado de su grupo "hasta el 13 de abril" a Quatennens, que había reconocido los hechos, y había condicionado su vuelta a un curso de concienciación sobre la violencia contra las mujeres. Un "grupo de trabajo" de cuatro personas evaluó si se cumplieron las condiciones de su regreso, según un comunicado del partido, que precisa que Quatennens está finalizando dicho curso.

"Es una mala señal para todas las mujeres que esperan de la izquierda y de su unión quebrar el patriarcado y sus mecanismos, de los cuales la violencia contra las mujeres es una de las expresiones más terribles", consideró el Partido Socialista (PS) francés en un comunicado. Para los socialistas, el retorno de Quatennens es "inaceptable" e incompatible con los valores que debe defender la coalición Nupes (Nueva Unión Popular Ecologista y Social), integrada por LFI, el propio PS, el ecologista EELV y el Partido Comunista de Francia.

Por su parte, la ecologista Sandrine Rousseau, en declaraciones a la prensa, recordó que en los últimos meses ella se levantaba y se marchaba del pleno de la Asamblea cada vez que Quatennens tomaba la palabra, pese a que no son las feministas las que tienen que irse.

La decisión de reintegrar a Quatennens, que fue coordinador de LFI y protegido de Mélenchon, se produjo cuatro meses después de su condena en diciembre pasado por hechos de violencia machista, reconocidos por el propio implicado.

Una bofetada y mensajes

Quatennens fue condenado por un tribunal de Lille (norte) a cuatro meses de cárcel -exentos de cumplimiento- tras declararse culpable de haber dado una bofetada a su esposa, de la que se está divorciando, durante una discusión. En aquel momento, LFI decidió excluirle, pero dejando la puerta abierta a reconsiderar la decisión pasado dicho periodo, condicionado a una reflexión y responsabilización por parte del diputado.

Este martes, el bloque "insumiso" aprobó, tras una votación, que las condiciones necesarias para rehabilitar a Quatennens se cumplían, incluido el arrepentimiento sobre algunos de sus comentarios iniciales que relativizaban la gravedad de su condena. Pese a que no formaba oficialmente parte del grupo, el político izquierdista sí había estado tomando parte en las sesiones de la Asamblea Nacional, como independiente, desde febrero pasado. Su reaparición en aquel momento, desoyendo las numerosas voces que habían pedido su dimisión dentro y fuera de la izquierda, había causado ya una gran polémica.