Escalada en Oriente Próximo

Israel desplegará al Ejército en la calle tras los dos atentados del Viernes Santo

Tres muertos después de los bombardeos israelís sobre Gaza y el Líbano

La escalada bélica no impide que 250.000 israelís salgan a la calle a protestar contra Netanyahu

La policía israelí trabaja junto al coche que fue usado en el ataque de Tel Aviv

La policía israelí trabaja junto al coche que fue usado en el ataque de Tel Aviv / AHMAD GHARABLI / AFP

France Presse

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El ministro de Defensa israelí, Yoav Galant, ha anunciado este sábado que el Ejército contribuirá con "recursos y tropas" a las actividades de la Policía en las ciudades, tras el ataque de ayer en Tel Aviv que se saldó con un turista italiano muerto y siete heridos. "Tras completar una evaluación de la situación operativa esta noche, el titular de Defensa, Yoav Galant, instruyó al estamento de Defensa la asignación de recursos y tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel para contribuir a las actividades de la Policía de Israel", ha informado una portavoz del ministerio en un comunicado, que precisó que la cantidad de tropas será determinada por miembros del aparato de seguridad.

Galant ha decidido además extender hasta el miércoles por la noche el cierre de los accesos a territorio israelí para palestinos desde Cisjordania ocupada y prohibir el acceso de palestinos desde la Franja de Gaza. "El cierre también incluye la cancelación de las medidas civiles que se aprobaron antes del Ramadán y la entrada de trabajadores a Israel", ha anunciado Defensa, en referencia la relajación de requisitos de entrada a Israel para palestinos de los territorios ocupados en ocasión del mes sagrado musulmán de Ramadán.

Al despliegue militar se une el reforzamiento de las unidades de policía. Cuatro batallones de reserva de su cuerpo de fronteras se desplegarían a partir del domingo en el centro de las ciudades. Los batallones se sumarán a las unidades ya movilizadas en la ciudad mixta de Lod y en la región de Jerusalén. 

El viernes por la noche, un turista italiano murió arrollado por un coche cerca del paseo marítimo de Tel Aviv, y otras siete personas resultaron heridas. El conductor, abatido por la policía, tenía 45 años y era de Kfar Kassem, una localidad árabe en el centro de Israel. Aún hay tres personas en el hospital Ichilov de la ciudad costera con heridas leves, indicó el establecimiento el sábado.

Horas antes, se produjo otro atentado en el asentamiento judío de Efrat, en Cisjordania, un territorio palestino ocupado por Israel desde 1967. Dos hermanas israelo-británicas de 16 y 20 años murieron y su madre resultó gravemente herida durante un ataque con armas de fuego contra su vehículo.

En Cisjordania, el Ejército israelí declaró este sábado haber sido objeto de disparos en la noche, cerca de la aldea palestina de Yabad (norte). Los soldados "dispararon hacia los atacantes" que se encontraban a bordo de un vehículo, y se identificó a una persona alcanzada por un tiro, según un comunicado de los militares. La escalada bélica se prolongó, y en esta ocasión procedía de Siria, país desde el que se dispararon tres cohetes, uno de los cuales cayó en terreno baldío de los Altos del Golán, según ha informado el Ejército israelí. Además, un palestino ha resultado muerto en Cisjordania por las balas "de la ocupación", según ha informado el Ministerio de Sanidad palestino.

Violencia en Jerusalén

El movimiento islamista palestino Hamás afirmó que el ataque de Tel Aviv era una "respuesta natural y legítima" a la "agresión" israelí en la mezquita Al Aqsa de Jerusalén el miércoles. Ese día, la policía israelí irrumpió en el lugar sagrado para desalojar violentamente a los fieles musulmanes, unas acciones que suscitaron numerosas condenas internacionales. La brutal intervención del cuerpo armado, en plenas celebraciones del mes musulmán del Ramadán, terminó con 350 detenidos y 37 heridos, según la policía y la Media Luna Roja palestina.

Al Aqsa está situada en la Explanada de las Mezquitas, tercer lugar santo del islam, y se encuentra en Jerusalén este, el sector palestino de la ciudad ocupado y anexado por Israel desde 1967. El complejo está erigido encima del Monte del Templo, considerado el lugar más sagrado para el judaísmo.

Netanyahu alegó que las fuerzas israelíes se vieron obligadas a actuar "para restablecer el orden" por la presencia de unos "extremistas" en la mezquita.

El jueves, una treintena de cohetes fueron disparados contra Israel desde Líbano, en la mayor escalada desde 2006 en la frontera entre estos dos países, que técnicamente siguen en guerra tras varios conflictos. Israel respondió bombardeando las infraestructuras del Hamás en la Franja de Gaza, donde gobierna, y en el sur de Líbano. Según el ejército israelí, los cohetes fueron disparados por los "palestinos" y probablemente por el Hamás.

Condena de la UE

La Unión Europea (UE) condenó el sábado la escalada de violencia y llamó a la contención. "Instamos a todas las partes a que actúen con la máxima moderación, eviten nuevas escaladas y promuevan la calma con motivo de las fiestas religiosas", declaró el jefe de la diplomacia del bloque, Josep Borrell, en un comunicado. Netanyahu ha prometido hacer pagar un "alto precio" a los "enemigos" de Israel por "cada agresión" contra su país.

Pese a la gravedad de la situación de seguridad, no ha remitido el ansia de los manifestantes para impedir que Netanyahu materialice la reforma de la justicia. Más de 250.000 personas se concentraron hoy en distintos puntos de Israel en un nuevo sábado de protestas contra la reforma judicial impulsada por el Gobierno de Benjamín Netanyahu, en esta ocasión bajo un fuerte dispositivo policial. Las manifestaciones de hoy marcan la decimocuarta semana consecutiva de protestas contra la polémica reforma, que busca otorgar más poder al Ejecutivo en detrimento de la Justicia, cuya independencia se vería profundamente socavada.

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