Malasia celebra elecciones anticipadas para poner fin a la crisis política

Malasia acude a las urnas este sábado para celebrar elecciones parlamentarias anticipadas. Alrededor de 21 millones de malasios han sido llamados a las urnas después de que el actual primer ministro, Ismail Sabri Yaakob, disolviera el Parlamento el pasado 10 de octubre.

El adelanto de las votaciones es el resultado de la crisis política que se atraviesa y tiene como objetivo consolidar el poder ejecutivo en Malasia, que desde 2018 ha visto pasar a tres primeros ministros.

Tres coaliciones principales

"Hay tres coaliciones principales con prácticamente igualdad de fuerza. Aunque ninguna tiene un líder especialmente popular (...) Son unas elecciones difíciles de predecir", ha explicado Ibrahim Suffian, director del grupo de opinión Merdeka Center, en un seminario de la Escuela singapurense de Estudios Internacionales Rajaratnam este viernes.

La Organización Nacional de los Malayos Unidos (UMNO), que encabeza la coalición Barisan Nacional -liderada por Yakoob-, ha controlado desde hace años la política del país, hasta 2018, cuando el Mahathir Mohamad -primer ministro entre 1981 y 2003- ganó al frente de la alianza Pakatan Harapan, que prometía regenerar y limpiar de corrupción el país. Sin embargo, Pakatan Harapan colapsó en 2020 con el actual opositor, Anwar Ibrahim, al frente. 

La tercera unión de partidos con opciones de gobernar es la conservadora Perikatan Nasional, liderada por el Partido Islámico de Malasia, cuyo candidato es Muhyiddin Yassin, quien gobernó entre mayo de 2020 y agosto de 2021, tras la dimisión de Mahathir.

Según el experto de Merdeka Center, Perikatan Nasional podría ser el gran beneficiado del desarraigo del voto de la etnia malaya en el tradicional Barisan Nasional, que además se encuentra sumido en luchas de poder intestinas.

No obstante, Perikatan Nasional cuenta con formaciones que defienden la aplicación de la ley islámica, lo que podría suponer el rechazo del resto de etnias, especialmente la china, que constituye el 23% de la población, y la india, el 7%.

Otros retos

Además de las múltiples candidaturas y la división del voto entre la etnia malaya, otro elemento que marcará los comicios es el voto joven. Unos 6 millones son votantes menores de 30 años que están "insatisfechos" por el rumbo del país, preocupados por la economía y que no se sienten identificados con los actuales líderes, según Suffian.

Asimismo, la fecha también podría suponer una traba para los comicios y la participación en ellos, ya que esta época del año coincide con frecuentes inundaciones en el país. Según sondeos previos, se espera que la participación sea menor que en los pasado comicios y ronde entre el 70%.