Prueba balística

Corea del Norte dispara tres misiles en apenas 10 días

Pionyang realiza el nuevo lanzamiento después de amenazar a EEUU con reacciones "más fuertes"

Un misil, en imagen de archivo.

Un misil, en imagen de archivo. / Archivo

Adrián Foncillas

Adrián Foncillas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Corea del Norte ha lanzado este viernes su tercer misil de la semana después de haber amenazado por la mañana a Estados Unidos con medidas contundentes si no renunciaba a su hostilidad. Del último misil se ignoran aún sus características. El estamento militar surcoreano se ha referido a él como "un proyectil no identificado", la eufemística fórmula empleada mientras analiza su trayectoria, velocidad y demás variables. Es probable que Corea del Norte desvele mañana los pormenores del lanzamiento.

Sobre el clima diplomático en Pionyang hay menos dudas. El Ministerio de Exteriores había denunciado horas antes la actitud "gangsteril" de Washington tras la última retahíla de sanciones. Se tratan, por un lado, de la propuesta estadounidense en el Consejo de Seguridad de la ONU de aumentar los castigos al régimen norcoreano por los seis lanzamientos que acumula desde septiembre. Y, por el otro, de la inclusión en su lista negra de seis oficiales norcoreanos que desde Rusia y China habrían suministrado bienes para la carrera armamentista. Si Estados Unidos continúa en esa línea de confrontación, añadía la nota ministerial, el país "se verá obligado a tomar reacciones más firmes y fuertes".

Los seis misiles de los últimos meses son vistos por Corea del Norte como el ejercicio legítimo de la autodefensa mientras la ONU juzga que violan sus convenciones. Confirman, en todo caso, un viraje de su estrategia militar. No ha practicado ningún ensayo nuclear ni lanzado misiles intercontinentales desde 2017 a pesar de que declaró finalizada la moratoria que Kim Jong-un había pactado con Donald Trump antes del proceso negociador. Sus últimos misiles son menos mediáticos que los que tienen una teórica capacidad de golpear Estados Unidos pero más sofisticados y útiles en un escenario de guerra porque complican la tarea de los sistemas de defensa. Los expertos subrayan su peligro para objetivos cercanos como Corea del Sur, Japón o las bases militares estadounidenses en el Pacífico.

Nervios en los países vecinos

A esa categoría pertenecen los proyectiles eyectados desde submarinos o los dos misiles hipersónicos probados la última semana. Mientras los balísticos trepan al espacio exterior y regresan a la tierra con órbitas verticales acentuadas, los hipersónicos describen trayectorias horizontales y cercanas a la superficie terrestre a velocidades que quintuplican la del sonido. Corea del Norte insiste en que sus misiles no persiguen a ningún país en concreto ni ponen en peligro su seguridad pero son comprensibles los nervios en el vecindario. Su lanzamiento del martes recomendó la cancelación de vuelos en varios aeropuertos de la zona.

El regreso de la dinámica de sanciones internacionales y desafíos militares norcoreanos dificulta la reanudación de las conversaciones para desnuclearizar la península. El proceso concluyó cuando Kim Jong-un y Donald Trump se levantaron de la mesa en Hanoi y no hay fecha de reanudación a pesar de los intentos de la nueva Administración de Joe Biden. Corea del Norte no descuelga el teléfono ni responde las cartas y ha asegurado que no acudirá a negociar hasta que Washington renuncie a su "política hostil".