Polvorín en Asia central

Borrell confirma que 300 colaboradores afganos de la UE esperan para ser evacuados

El primer centenar de afganos que trabajaron para las instituciones comunitarias ha llegado a Madrid

El jefe de la diplomacia europea describe lo sucedido en Afganistán como "una catástrofe y una pesadilla"

El alto representante para la política exterior y de seguridad común de la UE, Josep Borrell, durante su rueda de prensa de este miércoles en Bruselas.

El alto representante para la política exterior y de seguridad común de la UE, Josep Borrell, durante su rueda de prensa de este miércoles en Bruselas. / JOHANNA GERON / POOL

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Muchos de los afganos que trabajaron durante años con las instituciones comunitarias en Afganistán siguen esperando para ser evacuados del país. Así lo ha confirmado esta mañana el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, en una sesión del Parlamento europeo. Borrell ha asegurado que se ha logrado sacar del país a 106 afganos, mientras se trabaja para poner a buen recaudo a otros 300, una cifra que incluye también a algunos de los familiares de los colaboradores de la UE. "Estamos haciendo todo lo que podemos", ha afirmado el alto representante antes de añadir que Europa tiene la "obligación moral" de garantizar la salida con seguridad de los afganos que trabajaron a su servicio ante el incierto cambio de régimen que se avecina en el país centroasiático con el retorno de los talibanes.

Las 300 personas que restan por ser evacuadas están tratando de llegar al aeropuerto de Kabul, donde tendrán que conseguir un espacio en alguno de los aviones militares que despegan estos días, según ha declarado Borrell. "Lo más difícil es llegar al aeropuerto", ha afirmado el político socialista. "No sería posible hacerlo sin algún tipo de arreglo con los talibanes, que son quienes controlan estos días las calles de Kabul". El resto de los colaboradores afganos, poco más de 100 personas, ha llegado ya a Madrid después de hacer escala en Roma. 

La capital española servirá como primer centro de acogida hasta que "sean distribuidos entre distintos países comunitarios", según dijo el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. El primero de estos grupos, compuesto por cinco familias afganas, viajará después a Dinamarca, Alemania, Polonia y Letonia, donde solicitarán asilo.

Fracaso de la inteligencia occidental

Borrell describió lo sucedido estos días en Afganistán como "una catástrofe y una pesadilla" y se lamentó por el fracaso de la inteligencia occidental, que no fue capaz de prever el rápido desmoronamiento de las fuerzas de seguridad afganas y el régimen de Ashraf Ghani.

La vuelta de los radicales al poder en Afganistán ha puesto a la UE en la disyuntiva de decidir sobre las ayudas que presta al país centroasiático, muy dependiente de las importaciones y la ayuda extranjera. En ese sentido, Borrell ha destacado que la ayuda humanitaria debe incrementarse, mientras que la ayuda al desarrollo se debe frenar en seco "hasta que no sepamos quién gobierna en Kabul" y qué tipo de políticas seguirá.