Portugal reabre la frontera terrestre con España a partir del sábado

La frontera terrestre entre España y Portugal volverá a abrir este sábado tras más de tres meses cerrada. Lo ha anunciado el primer ministro portugués, António Costa, tras una larga reunión del consejo de ministros en la que también se ha aprobado el inicio de la última fase del plan de desescalada, también a partir del sábado, que incluye la ampliación de los horarios de los comercios y de la hostelería, la realización de actividades deportivas en grupo -tanto en espacios abiertos como cerrados-, y la celebración de espectáculos culturales hasta las 22:30 horas. 

Pese a la reapertura de las fronteras y a las nuevas medidas de desescalada, Costa ha advertido de que la situación todavía no está “ultrapasada”. “Tenemos que recordar que nada está garantizado de cara al futuro, esto es una lucha diaria. No podemos perder lo que hemos conquistado”, ha asegurado el primer ministro. Costa ha destacado la buena situación epidemiológica en la que se encuentra el país, que registra una incidencia de 66 casos por cada 100.000 habitantes y una tasa de transmisión R(t) igual a 1, pero ha insistido en que se mantendrán las cuarentenas obligatorias para los viajeros procedentes de los países con mayor incidencia. 

Portugal y España acordaron establecer controles en la frontera el pasado 31 de enero debido a la mala situación epidemiológica que atravesaban en ese momento los dos países. Desde entonces el tránsito de personas solo ha estado permitido a trabajadores transfronterizos, transporte de mercancías y vehículos de emergencia, a través de 18 pasos fronterizos. Una situación que llevaban semanas criticando tanto los comerciantes como los trabajadores de ambos lados de la ‘raia’, por los largos desplazamientos que han estado obligados a hacer durante este tiempo y por la caída de ingresos debido a la falta de clientes procedentes del país vecino.

Avance en la vacunación

Las medidas anunciadas hoy coincidirán con el fin del estado de emergencia y con el inicio del estado de calamidad, que a diferencia del primero no requiere de aprobación parlamentaria. Este nivel de alerta estará en vigor hasta el próximo 16 de mayo, aunque el Gobierno revisará la situación de cada municipio de forma semanal. Por ahora, hay ocho municipios que no avanzarán a la siguiente fase por registrar incidencias mayores a los límites fijados por el Ejecutivo. Uno de ellos es Odemira, con una alta concentración de trabajadores agrícolas, que acumula una incidencia cercana a los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes.

El plan del Gobierno es mantener el estado de calamidad hasta finales de mayo y aplicar nuevas medidas a medida que avance la administración de vacunas, que en este momento ya alcanza a un 22% de la población con al menos la primera dosis. “El Gobierno ha solicitado al equipo de técnicos un conjunto de reglas que entrarán en vigor cuando toda la población mayor de 60 años esté vacunada, algo previsto a finales de mayo”, ha señalado Costa.