PREOCUPACIÓN GERMANA

Primeras señales de alarma en Alemania tras el desconfinamiento

Algunas regiones empiezan a superar los índices de infecciones que el Gobierno estableció como límite y tienen que dar marcha atrás

Test de coronavirus en una planta procesadora de carne en Hamm, en el oeste de Alemania, este domingo.

Test de coronavirus en una planta procesadora de carne en Hamm, en el oeste de Alemania, este domingo. / periodico

Afp

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Primeros signos inquietantes en Alemania pocos días después de la vuelta a la normalidad. O nueva normalidad. El instituto nacional de virología Robert Koch, encargado de supervisar la evolución de la pandemia, informó este domingo de un aumento de la tasa de infecciones, de 1 a 1,1. El índice cuantifica el número de personas que alguien con el covid-19 va a infectar: una cifra inferior a 1 indica que el número de infecciones tiene tendencia a la baja, mientras que una cifra superior a 1 muestra una tendencia al alza. La cifra ha pasado de 0,7 a más de 1 en unos pocos días.

El instituto explica que es pronto aún para sacar conclusiones, pero en un comunicado señaló que las cifras de infecciones "deberán ser vigiladas muy de cerca en los próximos días". De momento, Alemania registra 169.218 casos, y solo 667 nuevos en las últimas 24 horas, una estadística muy moderada con respecto a las últimas semanas. El número de fallecidos asciende a 7.395, lo cual implica una tasa de mortalidad del 4,4%, que sigue siendo muy inferior a la de la mayor parte de países afectados por el coronavirus.

Residencias de ancianos

Es en este contexto que las autoridades anunciaron el pasado miércoles una progresiva vuelta a la normalidad. Tras el comienzo del desconfinamiento el 20 de abril, los restaurantes podían abrir y podían volver a clase los alumnos de la escuela primaria. Sin embargo, en pocos días ya hay unas cuantas malas señales, y no solo la ya mencionada. Tres cantones alemanes sobrepasan ya el límite autorizado de casos de nuevas infecciones en el marco del plan de desconfinamiento (50 por cada 100.000 habitantes); uno de ellos ya tuvo que dar marcha atrás en la desescalada. Los focos de infecciones son las residencias de ancianos y las fábricas de carne, que emplean sobre todo a trabajadores extranjeros.