EL DRAMA DE LA INMIGRACIÓN

Salvini lleva al límite la agonía del 'Open Arms'

El barco, ahora con 134 personas a bordo, sigue bloqueado en el mar por la negativa de Salvini a firmar la autorización para el desembarco en un puerto italiano

España acogerá a parte de los 147 migrantes a bordo del Open Arms

España se ha ofrecido a acoger a una parte de los 147 migrantes y refugiados a bordo del buque humanitario de la ONG Proactiva Open Arms. / periodico

Rossend Domènech

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Situación desesperada a bordo del 'Open Arms'. La salud física y psicológica de los 134 migrantes que permanecen en el barco de la oenegé española frente a la isla de Lampedusa (sur) empeora con el paso de las horas, mientras el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, se enroca en su negativa a autorizar su desembarco. "Amenazas de suicidio. Conatos de violencia. Todas las personas están física y psicológicamente rotas. Al límite. Necesitan ser evacuadas de forma inmediata", ha asegurado la organización española en las redes sociales, en un grito desesperado en busca de una solución.

El reparto de los migrantes acordado el jueves por seis países europeos, entre ellos España, no ha servido para que Salvini rectifique su postura. "¿Reapertura de puertos? No en mi nombre", ha espetado en Twitter el dirigente de la ultraderechista Liga. La interpretación más general de los medios italianos es que el titular de Interior "necesita" una demostración pública de fuerza en el país, después de que el lunes se acorraló a sí mismo con una agenda sobre una crisis de gobierno que el Parlamento rechazó, echando por tierra su deseo de un adelanto electoral inminente.

Y es que Salvini permanece ajeno a todos los llamamientos para cerrar la crisis humanitaria que se vive frente a sus costas. "Se trata de una situación insostenible", ha declarado Vanessa Mock, portavoz de la Comisión Europea. "Una vez más mis homólogos europeos nos tienden la mano, no nos limitemos a tomar posiciones de absoluta intransigencia", ha subrayado, por su parte, el primer ministro italiano, Giuseppe Conte.

Investigación de la fiscalía

El desembarco es competencia del delegado del Gobierno en Agrigento (Sicilia), quien espera instrucciones de Interior. Sin embargo, de por medio está una sentencia del tribunal administrativo de Roma que autorizó de hecho el atraque de 'Open Arms' en la isla de Lampedusa y que no se cumple. "Italia no respeta la sentencia del tribunal, somos tratados como delincuentes", han acusado desde la nave humanitaria.

Mientras tanto, la misma oenegé y el colectivo Juristas Demócratas han presentado sendos alegatos ante la fiscalía de Agrigento. Los abogados de Open Arms, "por secuestro de personas, violencia privada y abuso de poder", mientras que el colectivo de abogados pide evaluar posibles "violaciones cometidas  o actos omitidos" que puedan presentar importancia penal. La fiscalía ha abierto una investigación y en las próximas horas tomará una decisión.

Por su parte, el Centro Nacional de Coordinación de Socorro Marítimo, órgano que depende del Ministerio italiano de Transporte (dirigido por Danilo Toninelli, del Movimiento Cinco Estrellas), ha dado orden a las autoridades del puerto de Lampedusa para que permitan inmediatamente la entrada del 'Open Arms', según han informado la cadena Ser y eldiario.es. No obstante, algunas fuentes quitan relevancia a esa orden, pues la última palabra la sigue teniendo Salvini.

Situación "insostenible"

Después de 15 días esperando un puerto seguro en alta mar y estar ahora atracados a pocos metros del puerto de la isla, la situación a bordo "es de absoluta emergencia", según han comunicado desde la nave. Una inspección médica italiana realizada el jueves certificó que a bordo de la nave la "situación es insostenible". El psicólogo de la onenegé italiana Emergency Alessandro Dibenedetto ha referido que los rescatados han sufrido abusos torturas y violaciones de sus derechos humanos en su viaje hacia Europa y que actualmente se encuentran en "condiciones de extrema vulnerabilidad, tanto físcia como psicológica, agravadas por la incertidumbre y el estrés que están viviendo, lo que les expone a sufrir riesgos psicopatológicos".

La mayoría tiene problemas como ansiedad y depresión, pero también tensión muscular, insomnio, cansancio, estado de preocupación constante e incluso pensamientos de autolesión, expone el documento, que concluye que "resulta urgente y necesario solicitar la intervención inmediata por parte de las autoridades competentes" para poner fin a la situación.

En la noche del jueves al viernes dejaron desembarcar a cuatro inmigrantes más, algunos con riesgo de septicemia, mientras que el jueves se había autorizado el desembarque de otros nueve por razones médicas urgentes.

Estos desembarcos a cuenta gotas han creado tal malestar a bordo que el comandante ha ordenado arriar las chalupas de apoyo para poder intervenir si alguno de los migrantes se tira al agua en un intento de suicidio, como muchos han manifestado. La Guardia Costera italiana también ha enviado sus lanchas para controlar la situación. Además, se ha abierto un nuevo frente de problemas ya que, por pura casualidad, los 13 desembarcados por razones médicas proceden de países que en África consideran "blancos", lo que añade indirectamente un tinte racista interno a la ya compleja situación.