Cuatro años de edad pero apariencia de anciano

Un niño de Bangladés padece una extraña enfermedad que hace que parezaca un anciano. Bayezid Shikdar, de 4 años, nació con un exceso de piel que le cuelga de sus extremidades y de su cara. Además sufre de problemas cardiacos, de audición y de otro tipo de afecciones relacionados con su enfermedad.

Los familiares de Shikdar, unos agricultores de pocos recursos económicos, han consultado a varios médicos, pero ninguno de ellos ha sabido disgosticar el problema. Ahora, el pequeño ha ingresado de forma gratuita en el Hospital Universitario de Dacca, la capital, donde se ha puesto en manos de un equipo de especialistas.

"Hemos vendido nuestro terreno para que fuera atendido en un hospital local. Lo hemos llevado a curanderos. Hemos probado tratamientos basados en plantas naturales, pero todo ha sigo igual", se ha lamentado Lablu Shikdar, padre del niño. "Esperamos que pueda llegar a ser igual que los otros niños", ha añadido.

Algunos médicos que vieron al pequeño dijeron que padecía de progería, una enfermedad genética que provoca, poco después del nacimiento, un envejecimiento prematuro.Esta enfermedad se hizo popularmente conocida tras el estreno de la película 'La extraña historia de Benjamin Button', protagonizada por el actor Brad Pitt.

PRUDENTES EN EL DIAGNÓSTICO

Pero los médicos del hospital de Dacca se han mostrado prudentes a la hora de avanzar un diagnóstico. "En los casos de progería, el proceso de envejecimiento avanza con el tiempo", ha explicado Abul Kalam, jefe de cirugía plástica. "Según nos han dicho los padres de Bayezid, su envejecimiento se ha detenido y muestra síntomas de mejora".

El equipo médico no ha descartado que el caso tenga que ver con factores consanguineos. Los matrimonios entre miembros de una misma familia son frecuentes en las regiones rurales de Bangladés.

"Bayediz juega a fútbol y al escondite con sus primos. Es un niño talentoso. A veces coge los libros para ir a la escuela, aunque todavía es demasiado pequeño", dice su madre.

En este mismo hospital de Dacca trataron en el pasado otro caso muy extraño, la del llamado "hombre árbol", un paciente con verrugas impresionantes en las manos y los pies. Se convirtió entonces en el tercer caso conocido en el mundo y contaba que su vida era un suplicio porque perdió capacidad de movimiento. Sus manos pesas seis kilogramos y lo que más le entristecía era no poder abrazar a su hija.