Francia aborta un atentado yihadista en la base naval de Toulon

La Dirección General de Seguridad Interior (DGSI) detuvo el pasado 29 de octubre a un hombre de 25 años, conocido de los servicios secretos por su radicalización y apoyo público a las tesis yihadistas, al descubrir que había hecho acopio de armas para atacar la base naval de Toulon, en el sur de Francia. En Toulon está el portaaviones Charles de Gaulle, una de las joyas del Ejército francés que François Hollande ha decidido desplegar el próximo diciembre en el Golfo Pérsico para participar en los bombardeos contra el Estado Islámico.

El individuo ha sido imputado por un delito de terrorismo y encarcelado. Según fuentes policiales citadas por Afp, no tiene antecedentes judiciales. Al parecer había encargado por correo material militar –cuchillos de combate y un pasamontañas-- a China y tras ser detenido dijo que su primera intención era viajar a Siria para hacer la yihad, algo que intentó dos veces a lo largo del 2014.

En el marco de la nueva legislación antiterrorista, aprobada tras los ataques contra Charlie Hebdo, el pasado marzo el sospechoso fue objeto de una ficha S, por poner en peligro la seguridad del Estado, y se le prohibió salir de Francia. Según diversos medios galos, se le habría retirado el pasaporte. Durante el interrogatorio, reconoció estar en contacto con otro francés actualmente en Siria que le incitó a través de internet a “pasar a la acción”.

"NUESTRA MANO NO TEMBLARÁ"

El primer ministro, Manuel Valls, se ha felicitado este miércoles de la operación policial y ha garantizado que Francia seguirá comprometida en la lucha contra el terrorismo tanto dentro como fuera del país. “No hay riesgo cero. Siempre hay una amenaza terrorista importante y por eso combatimos el terrorismo en Siria e Irak, y también en Francia. Frente a esa amenaza estaremos particularmente comprometidos y nuestra mano no temblará jamás”, aseguró.