PRIMARIAS REPUBLICANAS

Las mayores barbaridades de Donald Trump

El candidato a la presidencia de los Estados Unidos ha sacudido la campaña con un discurso agresivo y sin pelos en la lengua

Donald Trump habla en una rueda de prensa en Iowa, Estados Unidos.

Donald Trump habla en una rueda de prensa en Iowa, Estados Unidos. / so

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El popular y excéntrico empresario Donald Trump está agitando las primarias republicanas a la presidencia de los Estados Unidos con sus discursos desmesurados y excesivos. La estrategia de romper con aquello de ser políticamente correcto le está saliendo bien y, aunque es muy temprano, lidera las encuestas de popularidad. Lo que está claro es que Trump no tiene pelos en la lengua. Estas son sus salidas de tono más notorias:

1. Racismo inaugural

¿Qué mejor manera de anunciar tu candidatura a la Casa Blanca que cargar contra los inmigrantes? Trump sabe que las bases conservadoras son partidarias de reforzar la frontera con México y contrarias a las olas migratorias y quiso sacar partido de ello. Ante sus familiares y seguidores acusó directamente al país vecino de enviar “drogas”, “criminales” y “violadores”. “Algunos de los que llegan son buenos, supongo”, llegó a decir con cierta ironía. Muchas empresas y personalidades dieron la espalda a Trump por esa declaración manifiesta de racismo pero sus números siguieron creciendo.

2. Cuestionando los héroes de guerra

En otro de sus impulsos incontrolados, Trump dijo algo que podría costarle muy caro. Al hablar del republicano John McCain, un emblema del partido y candidato a la presidencia contra Obama en 2008, aseguró que “se le considera un héroe de guerra porqué fue capturado pero a mí los que me gustan son los que no fueron capturados”. También se rió de el y le llamó "tonto" por graduarse el último de su clase:

Mientras Trump salía de fiesta con su limusina por Nueva York, McCain estuvo cinco meses captivo y torturado en Vietnam después de que el avión que pilotaba fuera abatido. Todo el partido republicano criticó duramente a Trump por esos comentarios pero, ante la incredulidad de muchos analistas, siguió creciendo como la espuma.

3. El poder del dinero

Los comentarios sobre los inmigrantes y McCain forzaron a muchos de sus rivales a la presidencia a criticar duramente a Trump. El más duro fue el gobernador de Texas Rick Perry, quien acusó al magnate inmobiliario de ser un “cáncer” para el partido. A Trump no le gustan nada las críticas y respondió con un golpe bajo al publicar una foto con Perry bajo el título “el gobernador en mi oficina durante el último ciclo (electoral) siendo simpático y suplicando mi apoyo y dinero. ¡Hipócrita!”.

El pique siguió y se mofó de Perry asegurando que “aunque ahora lleva gafas para parecer inteligente no le funciona”. En Twitter también apuntó que Perry debe someterse a un test de inteligencia antes de ser aceptado en el debate entre republicanos.

4. Mofa de sus rivales

Trump ha chocado en diferentes momentos con el también candidato republicano Lindsey Graham, amigo de McCain. Después de sus polémicos comentarios Graham dijo que Trump era el “mayor idiota del mundo”. Otra vez, el polémico magnate reaccionó a las críticas de forma muy poco ortodoxa y en medio de una conferencia dio el número de móvil de Graham. El senador por Carolina del Sur se lo tomó a broma y acabó publicando este vídeo.