Los progresistas de Renzi vencen en Italia

Los resultados reales de las europeas del domingo arrojaban a primeras horas de esta madrugada un espectacular e histórico 41% para los progresistas del Partido Demócrata (PD), que consigue un consenso como el que en los años 60 alcanzaba la difunta Democracia Cristiana.

En la mañana de este lunes las cinco circunscripciones en las que estaba dividida Italia para los comícios se han despertado todas ellas de color rojo, porque el voto progresista se ha repartido, contrariamente a lo que sucede en las elecciones nacionales, en toda la península. En el norte el PD ha obtenido el 37% de los votos, el 35% en el sur y un 47% en el centro.

El líder progresista y jefe del Gobierno, Matteo Renzi, comentará los resultados este lunes, pero en su primer tuit de esta madrugada ha escrito: “Es un resultado histórico, estoy conmovido y determinado, ahora a trabajar para una Italia que cambie Europa”.

El temido Beppe Grillo, que hizo una campaña a son de gritos contra la UE e insultos contra sus adversarios, habría perdido más un millón de votos respecto a las generales del 2013 (25%), situándose en un escaso 20%. “Grillo ha sido asfaltado”, titula hoy a toda página el conservador Il Giornale. Forza Italia liderada por Silvio Berlusconi ha pasado del 21% (2013) al actual 16,5% y la Liga Norte habría obtenido el 6%, aunque solo gracias a su enrraizamiento electoral en Lombardía (Milán).

El centro, diluido

Para los centristas del Nuevo Centro Derecha (NCD) y la extrema izquierda de la Lista Psipras habrá que esperar un recuento al último voto, porque esta madrugada se debatían en torno al 4%, listón para entrar en Estrasburgo.

La mayoría de los comentaristas de todos los canales de televisión y varios editoriales de la prensa escrita de esta mañana hacen hincapie en el hecho que el voto del domingo ha diluido el centro político italiano y ha cambiado el mapa político del país.

Gobernar solos

Frente a la consistencia positiva del resultado, todos los líderes del partido de Renzi han excluido que se anticipen las elecciones generales, apuntando a gobernar solos y no, como ahora, en coalición con una parte de los conservadores.

“El voto ha sido un premio al programa europeo progresista y ahora estamos más determinados que nunca a proseguir con las reformas”, ha dicho la vicesecretaria, Sara Serracchini. “La determinación a seguir adelante es mayor que nunca, ahora Renzi tiene que correr”, ha comentado Simona Bonafé, del PD.