Puerta a puerta en Virginia

Este fin de semana la mayor'ia devoluntarios deWashington DC nos hemos trasladado aVirginia, unestado tradicionalmenteconservador pero que apoyó aBarack Obama en las anteriores elecciones por un estrecho margen.

Ahora se ha convertido en undecisivo campo de batalla para la elección del futuro presidente de los Estados Unidos. Nos encontramos en el centro para repartirnos en diversos coches y de allí partir hacia el estado vecino, una hora y media.

El centro de operaciones era la impresionante casa deSandra yRon que nos recibieron con café, galletas y la lista de personas a contactar en el puerta a puerta. Mientras Sandra nos preparaba los mapas, folletos y nuestra pegatina acreditativa de voluntarios porObama, Ron nos explicaba el funcionamiento. Nos movíamos enparejas, generalmente cada una cubría un lado de la calle. Me tocó ir conLisa, una joven abogada, que me comentó entre risas que había dejado a su marido apurado con sus dosniños de ocho y seis años para hacer campaña.

Nuestro objetivo del día no era persuadir ni obtener más información de gustos o preferencias. Nuestro objetivo era asegurarnos de que los votantes deObama sabían cómo votar, qué llevar, dónde hacerlo... En Virginia, al igual que en otros muchos estados, se necesita algúndocumento acreditativo, como la licencia de conducir, el carnet de votante registrado o una factura de teléfono.

También debían tener en cuenta los horarios. El centro de votación abre de seis de la mañana a siete de la tarde. Si trabajan en elDistrito de Columbia (DC) --el martes 6 de noviembre, día de la votación, es día laborable-- seguramente no llegarán a tiempo para votar a última hora. Desde el banco de llamadas se había confeccionado una lista con los datos de los votantes demócratas de la zona. Teníamos también apuntado el centro electoral que les correspondía yfolletos por si querían más información.

Inmigrantes adinerados

Aldie es un barrio residencial muy tranquilo. Muchas de las casas estan decoradas con motivos de Halloween. "Buenos días, ¿es usted Alexandra Cruz? Me llamoMontse. Encantada de conocerla, soy de'Obama por América' y estamos comprobando que tenga todos los datos necesarios para poder ir a votar. ¿Sabe ya qué centro electoral le corresponde?".

En esta zona, la mayoría son adineradosinmigrantes o hijos de inmigrantes, generalmenteindios, pero tambiénárabes olatinos. Hace un día soleado y algunos han aprovechado el buen tiempo para salir a pasear, otros se han acercado hasta la escuela para ver los partidos de sus hijos. Se celebran competiciones de criquet y de fútbol.

LaFreedom High School es uno de los centros de votación de la zona. Lisa marcó la última persona que le quedaba. "Lista equivocada", apuntó. Se trataba de un acérrimo votanterepublicano que había intentado convencerla de que votar a Obama era lo peor que podía hacer. No se enzarzó en ninguna contrarréplica. Aquel no era el objetivo. Solo sonrió y le deseó buenos días.