Europa aísla más a Siria frente al apoyo ruso

La presión internacional sobre Siria ante la aterradora escalada de la represión contra la población civil aumentó ayer con fuerza con la retirada del personal diplomático de muchos países europeos y árabes. La UE anunció la preparación de nuevas sanciones contra Siria, al tiempo que Rusia, el último gran aliado de peso del régimen, insistía en apoyar al presidente Asad y rechazar «cualquier intervención extranjera» en la crisis, según declaró el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, tras entrevistarse en Damasco con Asad.

La retirada de los embajadores de los principales países de la UE y del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), que se sumó a las anunciadas el día anterior por Washington y Londres, dejó todavía más aislado al régimen sirio. Sin ir tan lejos como EEUU, que cerró la legación en Damasco por razones de seguridad, Bélgica, España, Francia, Italia, Holanda y Alemania llamaron a consultas a sus diplomáticos. El anuncio coincidió con la decisión de las monarquías árabes del golfo Pérsico de expulsar a los embajadores sirios y de retirar a los suyos de Damasco.

La decisión europea, no vinculada con la del CCG, fue tomada en bloque por los países implicados, según fuentes occidentales, pero la actividad en las legaciones continuará con normalidad. Según Efe, el embajador español, Julio Albi, tenía previsto abandonar Damasco anoche.

El portavoz de la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, explicó que, por ahora, la UE mantendrá al jefe de su delegación en Siria. La UE prepara una nueva batería de sanciones contra Siria, aunque recordó que la salida política a la crisis debe ser liderada por la Liga Árabe. En la nueva ronda de medidas, destinadas a cortar las fuentes de financiación del régimen, la UE estudia incluir un veto a todo comercio de oro y metales preciosos con Siria, que se sumaría a las sanciones ya impuestas en los sectores energético, financiero, bancario y comercial en coordinación con EEUU.

DETENCIONES EN BERLÍN / En Berlín, el Gobierno alemán llamó a consultas al embajador sirio horas después de la detención de dos presuntos agentes de Damasco acusados de espiar a opositores sirios en Alemania. La policía, que les seguía desde hace años, registró también las viviendas de otros seis sospechosos de trabajar para los servicios secretos sirios, informaJ.M. Frau.

Mientras tanto, en Damasco, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y el jefe del espionaje exterior, Mijail Fradkov, escenificaban su apoyo a Asad entregándole un mensaje personal del presidente ruso, Dmitri Medvédev. Al final del encuentro, Lavrov reiteró que Asad estaba preparado para detener la violencia, informaDmitri Polikárpov.«Está claro que los esfuerzos para poner fin a la violencia deben ir acompañados de un diálogo vinculante entre todas las fuerzas políticas. El presidente de Siria me ha confirmado su disposición para contribuir a esta labor y se ha comprometido plenamente a poner fin a la violencia venga de donde venga», declaró Lavrov a la agencia RIA Novosti.

En EEUU, la Casa Blanca baraja la posibilidad de enviar ayuda humanitaria a Siria mientras senadores republicanos piden armar abiertamente a la oposición.