Tamara Falcó desvela lo que más miedo le daba antes de su boda

La boda entre Tamara Falcó e Iñigo Onieva se ha erigido como uno de las acontecimientos más mediáticos del año. La edición especial de la revista ¡Hola!, con motivo del enlace, quedó agotada en cuestión de horas, aunque los quioscos pondrán a la venta una nueva tirada próximamente.

Asimismo, el seguimiento de esta ansiada ceremonia, celebrada el pasado sábado en la finca de El Rincón, ha sido máximo por varios motivos: las infidelidades que anteriormente mermaron los planes de boda, la confidencialidad con la que se ha organizado el evento (y las posteriores filtraciones), la exclusiva lista de invitados y, sobre todo, el vestido de novia de la marquesa de Griñón.

El incómodo momento que tuvo que vivir Tamara Falcó en su boda

Rozando el desmayo

Uno de los días más importantes para la socialité no estuvo excente de momentos incómodos y ahora, en una entrevista para la revista citada, también ha contado cuál fue una de sus principales preocupaciones durante la celebración. Y es que, al parecer, el vestido de Carolina Herrera diseñado para la ocasión por Wes Gordon puso en apuros a Falcó: "No me hubiese extrañado si me hubiera desmayado", ha reconocido.

La prenda, una de las dos que usó durante la fiesta, se caracterizaba por un diseño "muy tradicional pero muy moderno", tal como adelantó su diseñador antes de la boda. No obstante, el recubrimiento interior de lana y su ajustada silueta, así como las mangas largas, fueron solo algunos de los percances con los que tuvo que lidiar la hija de Isabel Preysler en una jornada de lo más calurosa. "Menos mal que hemos tenido dos máquinas enfocándonos", ha agradecido refiriéndose al aire acondicionado.