Polémica con Meghan Markle por presionar a senadores de EEUU usando su título real

Aunque el príncipe Enrique y su mujer, Meghan Markle, pusieron pies en polvorosa del Reino Unido, este enero hará dos años, y se instalaron en Estados Unidos dejando atrás sus funciones como figuras de primer grado en la familia real de Isabel II, la exactriz de 'Suits' y autora de cuentos infantiles sigue echando mano de su título de duquesa de Sussex cuando le conviene al otro lado del Atlántico, lo que ha levantado ampollas en el país norteamericano, al fin y al cabo, una república federal presidencialista.

Tal como han publicado varios medios, la semana pasada Meghan estuvo llamando a los teléfonos privados de varios miembros del Senado para presionarles para que apoyen el plan de gasto social del presidente Joe Biden, incluida la baja de maternidad remunerada.

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La esposa del príncipe 'exilidado' Enrique, de la que durante un tiempo se llegó a rumorear que tenía los ojos puestos en la Casa Blanca, ha sorprendido a varios legisladores republicanos al llamarles inesperadamente para que apoyasen la propuesta de Biden.

"Aquí Meghan, la duquesa de Sussex”

Según recoge 'Page Six', la republicana Shelley Moore Capito, senadora por Virginia Occidental, estaba conduciendo cuando recibió la llamada de Markle. Era un número oculto y pensó que era el senador demócrata Joe Manchin. Pero al descolgar su móvil escuchó la voz de la esposa del príncipe. "¿Senadora Capito? Aquí Meghan, la duquesa de Sussex”, cuenta la política que se presentó Markle. “Ni siquiera se cómo consiguió mi número”, ha asegurado Capito a la prensa.

La senadora Susan Collins (republicana por Maine) también le ha contado a la publicación 'Politico' que recibió una llamada de la esposa de Enrique, la misma que en una explosiva con Oprah Winfrey señaló a la realeza británica de racista. "Para mi sorpresa, me llamó por mi línea privada y se presentó como la duquesa de Sussex, lo cual es un poco irónico", ha comentado Collins. "Estaba feliz de hablar con ella. Pero estoy más interesada en lo que la gente de Maine me quiera decir al respecto", ha insistido la senadora con fina ironía.

Críticas en Gran Bretaña

Este comportamiento de Meghan también ha sido criticado en Gran Bretaña por varios comentaristas, como Colin Brazier (de GB News), que ha tuiteado: "Si [Meghan] tiene que llamar de imprevisto a alguien, y su único argumento para presionarle es un título real de una institución que ella y su esposo se han esforzado tanto por socavar...". Otro comentarista británico, Jackie P., también insinuó era hora "de que el Gobierno pusiera las cosas en marcha para eliminar el uso de sus títulos porque están rompiendo todas las reglas reales usándolas con fines políticos y fines comerciales". La comentarista real Brittany Gadoury ha subrayado "Meghan Markle, la ciudadana estadounidense, puede llamar a los senadores todo el día", pero "Meghan Markle, duquesa de Sussex, no tiene cabida para entrometerse en la política estadounidense".

Antes de estas llamadas, Markle había pedido al Congreso que aprobara el programa federal de ayuda a parental remunerada en una carta abierta a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, así como al líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer.