Mascotas muy queridas

Jesús Castro, el actor que se hizo popular con la película 'El Niño', derretía a sus fans la semana pasada con un vídeo con su pequeña mascota, de nombre Zeus. "¡Ya está en casa después de más de una semana ingresado por una gastroenteritis aguda y bajada muy grande de glucosa en sangre! Ahora este campeón llamado Zeus se va a poner fuerte al ladito mío".

Y sí, numerosos famosos llenan Instagram estos días de verano con las imágenes de sus animales más queridos. Algunos, como Àlex Lecquio, ha decidido ampliar recientemente la familia canina y ha adoptado un cachorro en una protectora. Al perrito le ha puesto Boby Puchum y ya ha sido presentado en las redes sociales con el vídeo pertinente.

"Es el mestizo-travieso-peludo más bonito del mundo. Síguele", decía el hijo de Ana Obregón, que le ha abierto cuenta en Instagram y no se olvida tampoco de su perra Luna, una golden retrierver. "17 añitos juntos. Huellas, parques y asfalto: componentes de una buena amistad".

El caso de la actriz Macarena Gómez merece también unas líneas. Ha vivido este verano una triste pérdida, en su caso de su querida Costra. Primero pidió ayuda para encontrarla en las redes, tras su desaparición en la zona del Alt Empordà (Girona). Después comunicó que, tristemente, había sido atropellada. "Quiero recordarla así", escribió con una foto en la que ambas aparecían juntas.

Su colega, el actor bilbaíno Asier Etxeandía, que anda inmerso en la gira de cociertos de presentación de su grupo, Mastodonte, no ve el momento de reencontrarse con su querida perrita Gora. (Viva en euskera). En una entrevista en 'El País' confesaba que dormían juntos "haciendo la cuchara". "Tengo unas ganas de verte que me muero", le decía.

El cómico y actor Dani Rovira es un animalista confeso, uno de los rostros más implicados con la acogida de perros, que no duda en denunciar en las redes y en televisión los casos de abandono y maltrato. El actor, que prepara gira por varias ciudades con su monólogo 'Odio', colaboró en 'El Hormiguero' en una sección en la que  buscaba hogar a diferentes perros. Buyo, Carapapa y Lobo son los tres perros con los que comparte su vida. "Ocho años contigo, Carapapa, volando a ras de suelo", escribía recientemente en su Instagram.

Inma Cuesta y su perrita Rumba son también inseparables. El pasado 18 de julio, la actriz celebró el 11º cumpleaños de su fiel compañera y no dudó en recordar que en España se abandonan más de 137.000 animales de compañía cada año, el primer país de Europa en esta categoría infame. "Sin dejar de lado que también somos el país que más maltrata a sus animales, siendo los galgos y los perros de caza los que peor suerte corren", detallaba.

La protagonista de 'Arde Madrid' pedía sentido común. "Hay que fomentar la adopción responsable, reflexionar previamente antes de tomar la decisión de acoger una mascota, sabiendo que es una responsabilidad y no un capricho pasajero. Educar desde la concienciación y el respeto. Las protectoras de animales están desbordadas, sus voluntarios hacen grandes esfuerzos por sacar adelante a cientos de perros y es desesperante ver cómo año tras año nada cambia".

Sigamos. La actriz Blanca Suárez tiene a Pistacho. El cantante malaguerño Pablo Alborán, a Terral, al que hemos visto crecer en las redes. Messi, al grandioso Hulk. Pilar Rubio, Sergio Ramos y sus tres hijos forman una familia donde también son protagonistas sus cinco perros. Jagger, Chulo y Lizzy son los tres más mayores.

Fernando Tejero tiene tres perritas: Pepa, Lía y Lúa, a las que este verano ha llevado de vacaciones a las playas andaluzas. Bibiana Fernández también es de las que sale de gira y busca hoteles que admitan a sus mascotas. Y el presentador Jorge Javier Vázquez vive también con unos galgos adoptados.

Los perfiles de mascotas 'influencers' se han multiplicado. Boby Puchum tiene mucho recorrido por delante, pero el modelo y actor Andrés Velencoso ha convertido a su perro en toda una estrella canina. En su cuenta de Instagram, @herrythedog, en la que ya suma más de 23.000 fans, aparecen fotos como la de ambos sentados frente a una paella en la Costa Brava.