Marisa Jara: "Querer dar una vida me ha salvado la mía"

Marisa Jara se ha volcado en la lucha contra el cáncer infantil. La modelo curvy ha apadrinado esta semana dos camisetas solidarias, a la venta por 49 euros, que la empresaria Pilar Oporto ha creado, tras la pérdida de una amiga íntima, como homenaje a todas las personas que luchan día a día contra esta enfermedad. Todos los beneficios irán destinados a la Fundación El Sueño de Vicky.

“Quiero agradecer a Pilar Oporto por haber contado conmigo en estos momentos'', empezó diciendo durante la presentación la modelo, que añadió: ''Siempre he sido una persona solidaria, pero ahora me toca serlo más que nunca porque también he sufrido esta enfermedad tan dura. Deseo que vendamos muchas camisetas y que podamos combatir el cáncer entre todos”.

La sevillana, de 39 años, no se lo pensó a la hora de colaborar con la causa, “Para un acto tan especial como este, ni me lo pensé. Estoy contenta de que haya cada vez más convocatorias de apoyo. Es una enfermedad tremenda. Cada día te enteras de un caso nuevo''.Y es que Jara ha vivido un calvario desde que en octubre del 2018 le hicieron unas pruebas para someterse a una fecundación in vitro y le diagnosticaron un tumor en el estómago. Fue operada de urgencia y, aunque al poco tiempo se recuperó, tuvo que volver a pasar por el quirófano para extirparle un pólipo en el útero.

Pese a todo ello, muestra una gran entereza y optimismo frente a la enfermedad. ''Me someto a un control cada tres meses y pronto me darán el alta'', aseguró. ''Era un tumor muy agresivo, pero ahora estoy limpia y solo debo hacer mis controles. No hablemos del cáncer como una sentencia", sostuvo en el acto en el que también se sumaron la modelo Elsa Anka y la nadadora medallista Thais Enríquez.

QUIERE SER MADRE "Querer dar una vida me ha salvado la mía"

Jara considera que, a pesar de que fue una noticia muy dura, reaccionó de forma positiva. "Cogí el toro por los cuernos y me dije que iba a salir de esta". Para la maniquí, "la actitud es tan importante como la medicina". "Recuerdo que el día antes de entrar en el quirófano me puse pestañas y el mismo día, por la mañana, me ondulé el pelo. Yo quería estar mona hasta en el quirófano. Incluso mi madre dijo que estaba mal de la cabeza", detalló entre risas.

Ahora está decidida a cumplir su sueño de ser madre. Un deseo que se truncó momentáneamente por la enfermedad. "Querer dar una vida me ha salvado la mía. Se supone que cuando me den el alta puedo volver a retomar el asunto. Es lo que más deseo. Tengo hasta un poco de ansiedad", bromeó.

Volcada en su trabajo como modelo curvy y en su firma on line de complementos, admitió que ahora no tiene pareja, aunque no esta cerrada al amor. "A ver sí de aquí a que tenga el niño, encuentro pareja, pero si no, seré madre soltera sin ningún problema", adelantó.

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