DIETA GERMANA

¿A qué panadería acude Ter Stegen en monopatín?

El portero del Barça hace la compra un par de veces por semana en un local de Gràcia

La panadería de la calle de Puigmartí donde compra el pan Marc Andre Ter Stegen.

La panadería de la calle de Puigmartí donde compra el pan Marc Andre Ter Stegen. / periodico

Igor Calderón

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Seguir la pista del paseo en patinete eléctrico de Ter Stegen por el distrito de Gràcia el domingo, cuando faltaban pocas horas para disputarse el duelo Barça-Atlético de Madrid, permite descubrir que el portero alemán combina su fantástica integración a la vida en Barcelona con la añoranza de su país. La globalización es también esto: un teutón que se mimetiza con el entorno sin olvidar las raíces.

¿De dónde venía Ter Stegen en su patinete llevando una barra de pan? De una panadería alemana situada en el número 34 de la calle de Puigmartí, muy próxima al mercado de Albaceria. El establecimiento responde al nombre de Brotzeit y vende distintas variedades de pan y pasteles.

Productos alemanes

Todo es producto 'made in Germany', como la Fritz-cola, la versión alemana del refresco norteamericano, los clásicos bollos horneados 'bretzel', los cruasanes bávaros y el 'lebber kaise' (carne en lonchas). La variedad de panes contempla piezas elaboradas con cereales diversos: 'friesen kruste' (pan de centeno), 'mehrkorn brot' (multicereales), 'kürbiskern brot' (trigo, sésamo y nueces), 'dinkel' (pan de espelta) y 'roggen júnior' (de centeno con masa madre). Son piezas grandes (entre 500 y 750 gramos) y los precios oscilan entre los 3.40 y los 5,20 euros la pieza.

La panadería Brozeit abrió hace un año en Puigmartí, 34, en una calle semipeatonal (solo se permite la carga y descarga de los servicios de reparto). Un escenario idóneo para la afición de Ter Stegen a desplazarse por el barrio de Gràcia en patínete. El guardameta del Barça y su esposa Daniela Jehle se trasladaron a vivir a este barrio después de dos años en una urbanización de Castelldefels.

Ter Stegen ha dejado atrás la vida compartida con vecinos y compañeros de vestuario como Messi, Suárez y, recientemente, Coutinho. En su proyección pública llama la atención la rápidez con la que ha aprendido el idioma castellano. Y ya se defiende en el catalán. Una evolución muy distinta a la de otros compañeros.

Aficiones y derecho a la intimidad

Hasta que este domingo comenzó a compartirse en el Twitter el vídeo de tres segundos en el que Ter Stegen pasa junto al mercado de la Albaceria sobre su patinete no se conocía la afición a desplazarse por el barrio en este medio de transporte.

Marc Skupien, propietario de Brotzeit, prefiere preservar la intimidad de su cliente y compatriota. Ter Stegen acude a la panadería una o dos veces por semana. ¿Siempre en patinete? "No lo sé ni tengo que decirlo. Nunca facilito datos de mi clientela", responde el panadero.