¿Eres una mujer con curvas?

¿Recuerdan cómo eran las mujeres en los cuadros del Renacimiento? Una de las primeras imágenes que se nos viene a la cabeza es el cuadro de ‘Las tres Gracias’ de Rubens. Así fue como durante siglos, antes incluso del Renacimiento, los cánones de belleza femeninos preferían a una mujer con curvas, más corpulenta y entrada en carnes. Sin embargo, sólo a partir de los años 50, la mujer cambió los patrones y se redujo a la mitad. ¿Por qué? Posiblemente los cambios sociales derivaron en estéticos hasta convertirse en un mero esqueleto en los años 90.

En el 2016 la contradicción es mayor si cabe. Mientras que en las pasarelas de la moda mundial vemos a maniquíes de fisonomía casi imposible para el resto de los mortales, en la calle no es así. Y no es así tampoco en las nuevas campañas de publicidad donde vuelven a aparecer modelos con curvas, como ya lo hicieron durante los años 90 de forma reivindicativa.

En este contexto de contradicciones, nació en Andalucía a finales del 2015 el primer concurso para mujeres con tallas más grandes. Sin embargo, el Curvy Fashion Model no llegó a Barcelona hasta el pasado mes de febrero. Un total de 22 mujeres se presentaron, pero sólo una se proclamará ganadora a principios de abril. El premio consta de una plaza en la agencia MIAH Models de Barcelona y un viaje a Hamburgo con la agencia de modelos CURVES.

Autoestima y personalidad 

¿Pero que busca un concurso así? Busca mujeres de entre 18 a 32 años y a partir de 95 cm de cadera, además de una altura mínima de 1.70. Por supuesto, buscan valores como la actitud, la profesionalidad, la constancia y la paciencia, y sobre todo, personalidad y autoestima. “Curvy Fashion Model no es un certamen de belleza sino un concurso de modelos con curvas, donde proporcionamos la oportunidad de trabajar en la moda a nivel nacional e internacional”, explica María José Serra, Directora del Curvy Fashion Model. Además, María asegura que el ‘boom’ mediático por las curvys es real en cuanto a trabajo, sobre todo en negocios como el de la lencería o la moda nupcial. “El hecho de dar el paso es por el incremento de demanda y, el ejemplo más claro,  son empresas como Mango con su línea Violeta”, añade. Para ser una modelo de curvas hay que cuidarse igual, no hay que dejar de ir al gimnasio y llevar una vida sana. Lo primordial, dicen desde el concurso, es estar proporcionada, sea talla 40 o 50.

Sea cual sea su talla, la mujer es bella por naturaleza, aunque parece que aún no nos hemos dado cuenta. A pesar de que las curvas vuelven a aparecer en el panorama social, muchas empresas no acaban de respetarlo. Es el caso de las dos cadenas de televisión abierta más importantes de los EEUU, la ABC y la NBC, que esta semana decidieron no emitir un anuncio publicitario de la marca de lencería ‘Lane Bryant’, llamado ‘This Body’ por ser demasiado provocativo. ‘Indecente’ es la palabra que describe para ellos un anuncio donde aparecen distintas modelos de talla grande en el que hablan abiertamente de su cuerpo, pero eso sí, en ropa interior. Nada mejor que aceptarse a uno mismo, tal cual como vino al mundo. Una contradicción más después de ver hasta la saciedad a las modelos de Victoria’s Secret.

Más información: http://www.curvyfashionmodel.com/