Bielsa-Guardiola, más que amigos

El antónimo de un duelo Guardiola-Mourinho podría ser un Guardiola-Bielsa. El Leeds United, club histórico ausente durante 16 temporadas de la Premier League, se bate el cobre este año con los mejores clubs de la mano del inclasificable Marcelo Bielsa. Guardiola tiene merecida fama de obsesivo y perfeccionista, pero Bielsa juega en otra categoría. Existe en Amazon Prime una serie documental sobre una temporada del Leeds donde se acreditan algunas de sus excentricidades, sus microanálisis para obtener microganancias.

Bielsa y Guardiola se comprenden y se admiran. Quedó subrayado en las ruedas de prensa previas al encuentro que Leeds y City disputan hoy en Elland Road (18.30 horas, Dazn). «Es un gran regalo tenerle en la Premier», dijo el técnico catalán. «Bielsa es la persona que más admiro en el mundo del fútbol, como técnico y como ser humano. Es único. En terminos de conocimiento del juego, estoy muy lejos de él». Parabienes rotundos.

«Es imaginativo»

Se dice que Guardiola viajó a Argentina para hablar con él y doctorarse en los insondables vericuetos del fútbol cuando tramaba convertirse en entrenador. Cruyff y Bielsa pueden considerarse sus referentes más innegociables. Javi Martínez explicaba que cuando jugaba a las órdenes de Guardiola en el Bayern, este siempre le hacía preguntas sobre los métodos de Bielsa, con el que coincidió en el Athletic.

El argentino, no obstante, dista de sentirse un maestro del preparador del City. «No me siento su mentor. Es evidente que no es el caso. Si hay un entrenador que es independiente en sus ideas, ese es Guardiola. Es imaginativo y es capaz de encontrar soluciones inmediatas a los problemas que encuentra», indicó Bielsa.

El City ha empezado renqueante el campeonato inglés. Un triunfo convincente y una derrota severa en casa ante el Leicester han puesto a propios y extraños a dudar de que pueda descabalgar al Liverpool, siempre al galope. El Leeds United, en cambio, ha tenido un inicio efervescente, con dos victorias y solo una derrota, en Anfield precisamente, en el primer partido, que tuvo sabor dulce (4-3). Se demostraron en ese bautismo los de Yorkshire que pueden competir bien en el fastuoso escaparate de la Premier.

No es asunto menor en el manual de Bielsa el autoconvencimiento. Entre esas cosas tan suyas consta su afirmación de que lee un texto de psicología a la semana y sus enseñanzas trata de mirar cómo aplicarlas a su oficio. En ocasiones envía fragmentos de sus lecturas a sus jugadores por Whatsapp. 

Se dice que pidió a los dirigentes del club que repararan una piscina maltrecha y en desuso, pese al alto coste que suponía, para dar la impresión a sus futbolistas de que ya forman parte de una entidad grande y con aspiraciones elevadas.

La línea azul

Bielsa, como tiene sus extravagancias, ha preparado la plantilla del regreso a la Premier sin haber firmado la renovación. Entendieron en el club que su carácter es como es y no parecieron preocuparse demasiado. Solo firmó su contrato a dos días de disputarse su primer partido, en Anfield. En chándal, como siempre. Tenía asuntos más urgentes en los que pensar.

Tan intenso y ensimismado es que, según contó The Guardian, hizo que pintaran una banda azul en el suelo desde su casa a las instalaciones de entrenamiento para que pudiera pedalear su bicicleta siguiendo esa línea sin tener que pensar en el camino a coger y así centrarse en el entrenamiento, en lo que le diría a los jugadores o en cualquier pensamiento lateral sobre su absorbente trabajo. Parece que el ayuntamiento local no apreció ese tuneado de la vía pública. Mitología Bielsa.

Tras el partido los dos entrenadores se darán la mano, quizá tomen una copa de vino y compartan detalles del partido que nadie más habrá apreciado. Con risas. Con intensidad. Son como son.