"Me dejó impactada ver a Alberto San Juan en la piel de Cristóbal Balenciaga"

Hace meses, antes de su estreno, Miren Arzalluz ya vio la serie de moda sobre el gran Maestro de la alta Costura, en Disney+. La máxima autoridad en Cristóbal Balenciaga, actualmente a los mandos del Palais Galliera, el Museo de la Moda de París, estuvo asesorando a los creadores y directores -Lourdes Iglesias, Aitor Arregi, Jon Garaño y Jose Mari-, sobre la personalidad y el trabajo del hermético personaje de fama mundial que en la ficción interpreta un Alberto San Juan de aúpa. Ella fue la llave que les dio acceso para que puedieran ver de cerca las colecciones y los diseños que el modisto de Getaria creó en la capital mundial de la moda, entre 1937 a 1968.

¿En qué ha consistido su colaboración con los directores de la serie 'Cristóbal Balenciaga'? 

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Mi labor ha sido como asesora histórica. Les he ofrecido mi conocimiento sobre el personaje y su obra. Pero estamos en el terreno de la interpretación, porque Balenciaga fue un hombre muy discreto, que habló muy poco y al que conocemos poco en la intimidad.

"Por mucho que sea magnífico no esperamos que un diseño de vestuario reproduzca la alta costura de los años 50 y 60. Es imposible reproducir exactamente lo que hizo Balenciaga"

¿También ha ayudado en la selección del vestuario?

A Bina Daigeler [diseñadora de vestuario] no le tenía que explicar quién era Balenciaga, sabe mucho de la historia de la moda, pero, junto al responsable del archivo Balenciaga en París, hemos sugerido cuáles fueron sus piezas icónicas, y le hemos dado acceso a las colecciones, para que vieran la construcción, los patrones y los tejidos.

El resultado en pantalla es magnífico.

Por mucho que sea magnífico no esperamos que un diseño de vestuario reproduzca la alta costura de los años 50 y 60. Es imposible reproducir exactamente lo que hizo Balenciaga.

¿Cree que se subraya suficientemente la importancia de la obra del de Getaria y su aportación a la moda?

Como cuando planteamos una retrospectiva en un museo, es siempre difícil dar la medida del impacto que tuvo, porque al final nos centramos en él y no tenemos ni tiempo ni espacio para tratar todo el contexto. Sí que es verdad que el equipo se ha centrado mucho en la personalidad, en sus contradicciones, en sus retos, en él como autor de una disciplina como la moda. Me consta que es una serie que se ha hecho con mucho respeto y con mucho rigor y sensibilidad, y eso me da mucha tranquilidad.

"Me consta que la serie se ha hecho con mucho respeto, rigor y sensibilidad, y eso me da mucha tranquilidad"

¿Cómo ha visto a Alberto San Juan? 

Es imposible reproducir a la persona exactamente, sobre todo porque todos los que interpretamos a Balenciaga no le hemos conocido. Pero creo que ha hecho un trabajo soberbio, y yo misma, la primera vez que lo vi en el rodaje en la piel de Balenciaga me quedé muy impactada.

Dicen que hay algunas licencias en la trama.

Lo importante es que lo han hecho conscientes, y no hay nada que modifique el relato. Aunque creo que más que licencias hay vacíos, que los directores [Lourdes Iglesias, Aitor Arregi, Jon Garaño y Jose Mari Goenaga] los llenan como consideran. También me imagino que han ido a buscar cierta tensión dramática, cierto ritmo... para que el espectador se enganche.

A pesar de su importancia, ¿cree que Cristóbal Balenciaga es un gran desconocido para el gran público?

Creo que no, pero en todo caso esta serie servirá para que mucha gente más joven lo conozca.

"El legado de Cristóbal Balenciaga está ahí, pase lo que pase con la marca. Eso es lo más importante"

¿La marca actual que capitanea Demna Gvasalia conserva algo del Balenciaga original?

Sí, claro, aunque no sea muy evidente. Conozco a Demna y sé que tiene un gran conocimiento del trabajo de Balenciaga, un enorme respeto y admiración, y comparten cuestiones fundamentales, como el deseo de reinventar la silueta y la relación entre el cuerpo y el vestido, de cuestionar y reinventar los volúmenes, y esa experimentación continua con los tejidos y los materiales. 

¿Qué diría Balenciaga de la marca que lleva su nombre hoy?

No le gustaría, pero porque partimos de la base de que él no quería que su nombre siguiera después de él. Era tan tremendamente perfeccionista que no podía soportar la idea de que alguien creara con su nombre. Pero el legado de Balenciaga está ahí, pase lo que pase con la marca. Eso es lo más importante.