Garagarza: “Si no hubiésemos ganado al Levante, nuestro entrenador seguiría siendo Ramis”

Horas después del agónico triunfo del Espanyol ante el Levante en Cornellà, llegaba el momento de pasar cuentas, analizar el pírrico mercado de invierno y valorar el incendio constante en el que vive el club perico. El domingo de protestas y crispación dio paso a un lunes de análisis por parte de la cúpula, con el CEO Mao Ye y el director deportivo Fran Garagarza como protagonistas. Los dos dirigentes explicaron sus sensaciones en plena convulsión social e institucional. También deportiva, aunque el bloque de Ramis se encuentra a un solo punto del ascenso directo, la lectura más positiva posible teniendo en cuenta el pobre juego del que debería ser el primer favorito al ascenso. 

Disparó primero Mao Ye, que justificó la escasez de fichajes en enero (solo ha llegado Rubén Sánchez tras cortar su cesión al Mirandés) por la “limitación económica” que arrastra el club en los últimos años. El consejero delegado se refirió también a las protestas de la afición antes, durante y después del choque ante el Levante. Los gritos de “directiva dimisión” y “Chino vete ya” en alusión al propietario volvieron a retumbar en el estadio. “Chen está totalmente informado y yo también, que lo viví en directo. Vender o no es decisión de la propiedad. El presidente nos transmite que hay que trabajar y luchar hasta el final. Es muy consciente del mal emocional de la afición”. 

"Rabia e impotencia"

Según Mao Ye, la cúpula es la primera en hacer “autocrítica”, pero considera que el malestar de los hinchas viene marcado por “los resultados del equipo” en los últimos cuatro años. “Hay que medir bien y tratamos de aprender de los errores. El pasado ya es pasado. No tengo ninguna queja de lo que vivimos este domingo en el campo, la gente expresa su rabia e impotencia”.

"Chen está totalmente informado de las protestas. El presidente nos transmite que hay que trabajar y luchar hasta el final. Es muy consciente del mal emocional de la afición"

Mao Ye

— CEO del Espanyol

Garagarza incidió en los recortes, pero intentó desmarcarse del pesimismo. “Tenemos una plantilla que va a dar un paso más, estoy convencido. Hay jugadores lesionados y en fase de recuperación que también serán fichajes de invierno. Hay máxima confianza en la plantilla”, remarcó el director deportivo, que valoró la opción de traer a un jugador de ataque para suplir la grave lesión de Expósito. “Entendimos que no. Primero por la gran limitación, el margen de maniobra era mínimo, y después porque no íbamos a meter más ropa en el armario por meterla”.

"Alma y corazón"

El dirigente vasco reiteró su apoyo al técnico que sustituyó a Luis García. “Teníamos claro después de la derrota contra el Eldense que debíamos seguir con Ramis. Y seguimos confiando en él”, afirmó el ejecutivo, que se mostró firme al ser cuestionado por lo que habría pasado en caso de tropezar ante el Levante: "El entrenador seguiría siendo Ramis".

Por otro lado, reflejó su “tristeza” por la situación convulsa del equipo. “Tenemos que revertirla porque esto es de todos y entre todos lo vamos a sacar. Hemos de dar mucho más, es obvio, y cuando lo hagamos la gente nos va a dar. La afición nos espera, invierte en los viajes. Esto es impagable. A base de alma y corazón vamos a lograr la sinergia con ellos”.

"El Espanyol es un club muy grande y el día a día te lleva a un desgaste. Hay un objetivo claro que es el de mejorar y ascender. No estoy débil ni desmotivado"

Fran Garagarza

— Director deportivo del Espanyol

El jefe del área deportiva reconoció esperaba más de los fichajes ejecutados en verano. “Hay más margen de mejora. A día de hoy no me pongo una nota buena, para nada”. El director deportivo sí se mostró satisfecho por el mayor protagonismo de la cantera. “La valentía y juventud de los chicos siempre ayuda. Hemos de trabajar muy duro para evitar fugas de ‘La 21′. Ahora mismo hay ofertas de clubs importantes por seis jugadores de la cantera”.

Garagarza, finalmente, se mostró convencido de lograr el ascenso a Primera a pesar de las actuales dificultades. “El Espanyol es un club muy grande y el día a día te lleva a un desgaste. Hay un objetivo claro que es el de mejorar y ascender. No estoy, para nada, débil ni desmotivado”, concluyó.