La crónica del Rayo-Espanyol: Un genial Darder devuelve la vida a los pericos

Terminó achicando balones en el área de Pacheco, pero el botín (un triunfo que le coloca a un punto de la salvación cuando aún quedan tres jornadas) merecía, y mucho, la pena para el Espanyol. Ganó mucho más que un partido al Rayo (1-2) en Vallecas.

Conquistó la esperanza el equipo de Luis García gracias a la sabiduría futbolística que exhibió Sergi Darder, su capitán, el jugador que iluminó el camino de la esperanza en Vallecas. Aguantó con dignidad el equipo perico para festejar una victoria que le devuelve a la vida.

Rompió a llorar Darder nada más acabar el partido, oculto su rostro bajo una estridente toalla de color verde luminoso siendo, en realidad, la imagen de miles y miles de pericos. Tiene 34 puntos el Espanyol, sobreviviendo en Vallecas, esquivando el primer match-ball del curso.

El protagonista

Hay jugadores que trascienden. Están por encima incluso de su decisivo gol – era el 0-1 – o de su maravillosa jugada, con un derechazo hermoso que topó con el poste izquierdo de Dimietriesvki antes de que la pelota acabara en los pies de Nico Melamed que significó el 1-2. Jugó el capitán con el alma y el sentimiento perico que exhibe cada vez que habla. Era su partido, un asunto de vida o muerte futbolística.

Y Darder lo entendió desde el primer instante, antes incluso de que la pelota comenzara a rodar por la pradera de Vallecas. Firmó un monumental encuentro para darle esperanza al Espanyol y a su gente.

Ejerció un liderazgo que supera lo puramente futbolístico, gol y jugada descomunal para servir de preámbulo al gol que devuelve la vida al equipo blanquiazul. Iba con molestias el capitán, exhausto por el desgaste físico de un partido que ya cansaba antes de jugarlo, pero no quería pedir el cambio.

"¿Esos 100 aficionados del Espanyol en Vallecas? Están locos, yo no habría venido después de la hostia que nos dimos en el derbi. Le dimos el mensaje de que creemos"

— Sergi Darder, capitán del Espanyol

Aunque fue sustituido a dos minutos del agónico final del partido que ha colocado al Espanyol en la senda de la resurrección. "Ahora dependemos de nosotros, nos hemos quitado un peso de encima muy grande. Parece que hemos hecho muchísimo y no hemos hecho nada. Si perdíamos nos íbamos a Segunda", dijo el capitán.

"El fútbol nos ha regalado otra oportunidad para salvarnos. Muchos nos daban por muertos, estamos muy vivos. Pero la realidad es que no hemos hecho nada", sentenció Sergi Darder. "¿Esos 100 aficionados del Espanyol en Vallecas? Están locos, yo no habría venido después de la hostia que nos dimos en el derbi. Le dimos el mensaje de que creemos. Estoy súper feliz, pesando ahora tres kilos menos".

Un mal día para...

Un mal día para Óscar Gil. No estuvo lúcido el lateral derecho del Espanyol, marcado como quedó por el penalti que cometió cuando expiraba la primera mitad. Tenía el equipo de Luis García el control del partido. Pero ese balón aéreo que no atrapó Pacheco desencadenó una tormenta en el área perica. La pelota, caprichosa ella, se cruzó en el brazo derecho de Óscar Gil provocando un penalti que ejerció entonces un efecto devastador en el ánimo perico.

Tenía el partido en su mano hasta que la mano del defensa permitió a Raúl de Tomás marcar de penalti el empate. Pacheco, engañado desde el inicio por el lanzamiento del delantero rayista, ni se movió en el lanzamiento quedándose petrificado. Al igual que Óscar Gil, que estuvo en los dos primeros goles del soleado mediodía de Vallecas. Asistió a Sergi Darder en el 0-1 y cometió el penalti del 1-1.

"No quise celebrar el gol por respeto al Espanyol, no procedía", argumentó Raúl de Tomás recordando su pasado perico.

La táctica

Modificó Luis García su dibujo. Abandonó el formato de los tres centrales apostando por un clásico 4-2-3-1, un dibujo poco usado por el técnico blanquiazul. Y en la primera mitad le salió bien aprovechando una excelente solvencia defensiva, bien pertrechado como andaba Pacheco.

Tras un inicio donde el Rayo quería intimidar con su juego vertical, el Espanyol se entonó gracias al liderazgo de Sergi Darder, bien escoltado por Calero, que ejerció de hombre escoba en el centro del campo. Esa idea del 4-2-3-1 le hizo bien al equipo blanquiazul porque desactivó, al menos en esa primera mitad, la atrevida propuesta que siempre exhibe el Rayo.

Topó, en todo momento, con la mejor versión de Pachecho, el portero que firmó una parada prodigiosa para mantener con vida al Espanyol.

Las reacciones

Vivió con angustia los 90 minutos. Los 90 más los cinco del tiempo añadido. Luis García, el técnico del Espanyol, estaba al borde del ataque de nervios, pero, finalmente, se salió con la suya.

"Este cambio de esquema nos ha permitido adaptarnos a las situaciones del partido. Estoy muy satisfecho con como han entendido los jugadores el esquema de juego", confiesa Luis García

"Cuando estás en esta situación cada cosa que pasa te agita por dentro, pero estaba tranquilo porque mis jugadores han hecho un trabajo extraordinario. Se ha visto un muy buen Espanyol, con mucho criterio con el balón y solvente defensivamente", indicó el entrenador perico.

"Este cambio de esquema nos ha permitido adaptarnos a las situaciones del partido. Estoy muy satisfecho con como han entendido los jugadores el esquema de juego", aseguró Luis García, feliz porque "el equipo ha sabido sobreponerse al empate del Rayo Vallecano y ha sabido gestionar la ventaja en el marcador".

"Era crucial este partido, este equipo superó el momento duro del derbi y cuando la gente se cree que está muerto ha demostrado que está vivo, muy vivo"

— Luis García, técnico del Espanyol

"Era crucial este partido, este equipo superó el momento duro del derbi y cuando la gente se cree que está muerto ha demostrado que está vivo, muy vivo", añadió Luis García, admitiendo que "la procesión va por dentro", ensalzando que sus futbolistas "se han dejado la vida, con lágrimas en el vestuario al acabar el partido".

Le espera ahora el Atlético en Cornellà-El Prat. "No estamos para elegir momentos sino para jugar con la misma energía y convicción que hasta ahora porque el perico nos va a animar como siempre", dijo Luis García.