Volver a los parques de atracciones sin miedo al coronavirus: Mascarilla y un tercio de aforo

El final de curso atípico no impide que muchos niños estén deseando iniciar sus vacaciones con gritos de adrenalina, o sorpresa, en un parque de atracciones. Un plan más que merecido tras meses de encierro y que todavía deberá esperar un poco en la mitad del país, dado que estas instalaciones no podrán abrir sus puertas hasta alcanzar la fase 3 de la desescalada. La sombra del coronavirus estará presente en todas las atracciones, que verán limitado su aforo a un tercio, y en las actuaciones, ya que se eliminan los photocalls con los personales de animación y los pasacalles deberán mantener la distancia de seguridad y evitar la interacción con los visitantes salvo que se lleve mascarilla.

Port Aventura, Tibidabo, Terra Mítica y el resto de grandes parques de atracciones del país aún no tienen fecha definitiva de apertura, aunque se preparan para retomar su actividad a comienzos de julio y tratar de salvar al menos en parte el golpe asestado en el inicio de la temporada. De momento, las instrucciones publicadas en el BOE y en el protocolo de medidas sanitarias a seguir por estos recintos de ocio, y que rigen también para los zoológicos y los acuarios, son menos estrictas que en Japón, y no se prohíben los gritos de nervios al montar en una montaña rusa. Pero sí deja claro que la experiencia será un poco diferente y menos bulliciosa que unos meses atrás, ya que los recintos estarán a la mitad de su capacidad. Para facilitar este control de asistencia, se fomentará la venta online de entradas.

Geles a la entrada y la salida

El cambio más notorio se vivirá, sin embargo, en las atracciones, donde el aforo se reducirá al 33%. Bloqueo de asientos, fundas de plástico, vinilos indicativos o control con acomodadores son algunas de las medidas que deberán llevarse a cabo para garantizar la distancia de seguridad entre los usuarios individuales o grupos familiares en función del tipo de atracción, ya sean de exterior o de interior. Y más que a algodón de azúcar o a palomitas, en el recinto olerá a geles hidroalcohólicos o soluciones desinfectantes, que deberán estar accesibles a la entrada y a la salida de cada servicio, atracción o actividad.

Los espectáculos también se resentirán un poco, ya que las recomendaciones sanitarias apuntan a que se eviten todas aquellas actividades que supongan contacto físico con los visitantes, como los photocalls, los pasacalles o las caracterizaciones a menos que se lleven equipos de protección individual como mascarillas.

Control de esperas

Los parques de ocio ya llevaban ventaja a la hora de gestionar los flujos de público por los recintos, una de las medidas que se aconsejan en el protocolo sanitario para evitar aglomeraciones. Así, de una manera u otra ya existían mecanismos para controlar las esperas en accesos e instalaciones, como las zonas de embarque y desembarque, las colas.

Ahora, esta gestión de los tiempos de espera se potenciará para garantizar la distancia de seguridad con marcas en el suelo, o mediante el uso de balizas, cartelería y señalización. Asimismo, los parques deberán hacer un seguimiento sobre los flujos de clientes para disminuir los cruces e informar de itinerarios alternativos que garanticen a los clientes la separación física.

Sin tocar barandillas

Habrá carteles señalando la conveniencia de evitar el contacto continuo en zonas de barandilla y similares, especialmente en los parques de animales. No obstante, según consta en el protocolo sanitario elaborado por el Instituto para la Calidad Turística Española y el Ministerio de Sanidad, se deberá incrementar la frecuencia de limpieza y repasos, sobre todo en las zonas de mayor contacto. Es el caso de los asideros de las atracciones, los pomos de puertas, mostradores, tornos, suelos, miradores, teléfonos o grifos, así como aseos. Y las fuentes de agua distribuidas por el recinto que se tengan que accionar con las manos permanecerán cerradas.

Desinfeccion de flotadores

También se recomiendan rutinas especiales de limpieza para piscinas de el uso de clientes, instalaciones de animales, toboganes y parques infantiles. De la misma medida, los parques de atracciones o acuáticos deben establecer planes de desinfección de elementos de préstamo o alquiler para los usuarios, como sillas de ruedas, pulseras de accesos, gafas 3D, flotadores o hamacas tras su uso.

Respecto al resto de espacios, como zonas comerciales, los restaurantes y los hoteles de estos recintos, se deberán cumplir con las condiciones y medidas de higiene establecidas para cada uno de ellos en la fase 3 de la desescalada.

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