Sánchez ataca a Feijóo por sus fotos con Marcial Dorado: "Es inquietante que tuviera relaciones estrechas con un narco"

"Es inquietante que un dirigente político haya tenido un tipo de relación tan estrecha con un narcotraficante y creo que eso es algo compartido por miles de españoles", dijo Pedro Sánchez este jueves. El presidente del Gobierno y candidato socialista había evitado hasta ahora referirse a las comprometedoras fotos de Alberto Núñez Feijóo tomadas a mediados de los 90 con el narcotraficante Marcial Dorado, con quien compartió viajes y vacaciones. Sánchez obvió este asunto en su cara a cara con el líder del PP, y tampoco siguió a Yolanda Díaz el miércoles, durante el debate a tres con Santiago Abascal, en el que la aspirante de Sumar sacó a relucir una de esas imágenes para preguntar al líder de Vox qué le parecían. Pero esta vez, a solo cuatro días de las elecciones generales del domingo, Sánchez entró de lleno y de forma muy dura. 

Feijóo insiste en que cuando veraneaba con Dorado no sabía que era un narco: "Ahora es más fácil porque hay Google"

El jefe del Ejecutivo no se había referido a este asunto porque, según sus palabras, ha querido llevar a cabo durante estos días una “campaña en positivo”. Pero no tuvo más remedio que hablar de las fotos durante una entrevista en La Sexta cuando le preguntó el conductor del programa, Antonio García Ferreras. “Ayer el señor Feijóo volvió a mentir. Perdió una oportunidad de aclarar su relación con este narcotraficante. Las excusas sobre internet y Google caen por su propio peso”, señaló Sánchez tras referirse a esas imágenes como “inquietantes”. 

El candidato del PP había acudido el día anterior a la misma cadena de televisión. Pese a que en la época en la que se subía al yate de Dorado las actividades delictivas del narcotraficante ya habían sido publicadas en numerosos periódicos, Feijóo aseguró que él entonces las desconocía. "No, en aquel momento no tenía ninguna acusación por ello. Ahora es más fácil saber cosas porque hay internet, existe Google… Hasta que yo lo conocí, este señor no tenía ninguna causa con el .narco”, dijo Feijóo.

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Para Sánchez, son excusas que “caen por su propio peso”. El jefe del Ejecutivo, en cualquier caso, no quiso abundar en esta polémica, que sirve a los socialistas para intentar vincular a Feijóo con la “mentira”, algo que llevan haciendo no solo por sus antiguos vínculos con Dorado, sino también por sus palabras sobre las pensiones, después de que introdujera el dato falso de que el PP siempre las había revalorizado conforme al IPC. 

La presunta remontada

Impulsado por estas recientes polémicas, que han situado a su principal rival a la defensiva, y tras un debate a tres que mostró la sintonía de Sánchez y Díaz para reeditar la coalición, el PSOE ha recuperado cierto optimismo en el tramo final de la campaña. La victoria, dicen en el partido, es posible. O al menos, que el PP y Vox no sumen mayoría, abriéndose un escenario que puede desembocar en una nueva investidura de Sánchez, si logra pactar con todos los grupos salvo los de la derecha, o en repetición electoral. 

“Hay una movilización progresista que va a decir ‘no’ a un Gobierno de Feijóo con Abascal y ‘sí’ a uno del PSOE con Yolanda Díaz”, señaló Sánchez. Todos los esfuerzos del candidato se vuelcan en activar a los simpatizantes socialistas. Con un resultado como el de noviembre de 2019, de en torno al 28% de los votos, que es el que reflejan casi todas las encuestas, el presidente tiene esta vez muy difícil continuar en la Moncloa. 

Si lo consigue, será en gran parte por Catalunya, donde nadie discute que el PSC será la fuerza más votada, a mucha distncia del resto. La crisis territorial había ocupado en esta campaña un papel secundario, pero en los últimos días ha recobrado protagonismo de la mano de Abascal, que el martes anticipó “sin ninguna duda” tensiones en Catalunya si gobiernan PP y Vox y defendió una “intervención duradera” en la comunidad autónoma. 

“Eso supondría situarnos de nuevo en unas dinámicas muy perjudiciales para los españoles y para la imagen de España”, dijo Sánchez, en referencia al referéndum y la declaración unilateral de independencia de 2017. El presidente defendió como en otras ocasiones sus acuerdos parlamentarios con Bildu y ERC, que han permitido sacar adelante medidas como la revalorización de las pensiones y el ingreso mínimo vital, pero también volvió a cerrar la puerta a las consultas sobre la independencia de Catalunya y Euskadi que piden republicanos y aberzales. “Por supuesto que no -zanjó-. Referéndums ha habido cuando el PP gobernaba, no con nosotros”.