ELECCIONES 28 DE MAYO

Podemos azuza la compra de votos en Melilla para atacar a los aliados de Yolanda Díaz

Siga aquí el directo de los últimos días de la campaña electoral

El partido culpa del escándalo a "las políticas de violencia y discriminación" que allí se aplican

Ione Belarra en un mitin electoral.

Ione Belarra en un mitin electoral. / EFE

Ana Cabanillas

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Podemos reaviva la pugna a la izquierda del PSOE a las puertas de las elecciones. La investigación abierta sobre la compra de votos en Melilla y la presunta implicación de Coalición por Melilla, uno de los aliados potenciales de Yolanda Díaz, e integrado en el Acuerdo del Turia, la alianza impulsada por partidos que han apoyado abiertamente a Sumar, entre los que se encuentran Más País o Compromís

La detención y puesta en libertad este martes del yerno de su líder, Mustafá Aberchan, y del número tres de la lista electoral en el marco de la investigación judicial ha servido de munición al partido de Ione Belarra. La pugna entre Díaz y los morados había quedado aplazada hasta después de los comicios. Pero Podemos ha aprovechado este asunto para atacar a los que a día de hoy son principales competidores por la izquierda en dos plazas clave, como son la Comunidad de Madrid Comunidad Valenciana, los dos lugares en que la cúpula morada se ha volcado en campaña. 

“Es muy grave y a mí me preocupa que algunos partidos progresistas hayan pensado que estos son socios aceptables con las previas que ya conocíamos", destacó este martes Ione Belarra, en referencia clara a los miembros de la Alianza del Turia, que la semana pasada expulsó al partido melillense de manera cautelar, hasta que se aclare la investigación en marcha.

En estos momentos, la integran Compromís, Verdes Equo, la Chunta Aragonesista, Más País, Drago, Més per Mallorca y el partido ceutí Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía. Fuerzas todas ellas que han exhibido sintonía con Yolanda Díaz, con quien los morados mantienen una pugna abierta, ahora en pause

Nervios en Madrid y Valencia

El nerviosismo en la organización ante las encuestas, que le sitúan en el alambre del 5% que aseguraría su entrada en los parlamentos autonómicos, ha hecho abrirle una ofensiva a Más Madrid, líder de la oposición a Isabel Díaz Ayuso, o “la izquierda cuqui”, como vino a bautizarle Belarra el fin de semana.

Esta situación límite en la capital también les ha llevado a diseñar su estrategia de campaña en torno al hermano de la presidenta madrileña, tratando de llevar este asunto a la política nacional, con menciones en los mítines celebrados en gran parte de los territorios. 

Los ataques a Compromís también se han sucedido durante la campaña, a quien Irene Montero tildó de “partido de centro”. "Si hubiese sido por PSOE y Compromís no habría habido Gobierno de coalición en este país”, aseguró el martes de la pasada semana en un mitin en Valencia. 

Múltiples críticas

Belarra no ha sido la primera voz del partido que ha criticado a los aliados de Yolanda Díaz a cuenta del escándalo de Melilla. Ya el sábado el portavoz parlamentario de Podemos, Pablo Echenique, ponía en cuestión a estos partidos de izquierda, a quienes citaba expresamente. "No entendemos por qué la Chunta está con Más País y Compromís, en el así llamado Acuerdo del Turia, con Mustafá Aberchan, que fue condenado por compra de votos en Melilla y protagoniza todos los telediarios. El qué y el cómo son muy importantes en política, pero el quién es importantísimo", cargó. 

Seguía así la estela de Pablo Iglesias, ex líder morado y presidente de la fundación de Podemos. En marzo Iñigo Errejón y Joan Baldoví acudieron a Tenerife para arropar al ex diputado morado Alberto Rodríguez. A la cita también acudió el líder de Coalición por Melilla, ya condenado en 2008 a dos años de cárcel e inhabilitación por compra de votos.

El ex vicepresidente aprovechó la ocasión para reprochar estas alianzas a sus antiguos aliados, en un mensaje donde también tildaba a Joan Baldoví, el candidato de Compromís, de “profesional eterno de la política". "En esta foto hay un señor que fue condenado por comprar votos y que fue presidente de Melilla gracias al apoyo de Jesús Gil. Es bueno construir alianzas pero no con profesionales eternos de la política ni con corruptos", espetó Iglesias en Twitter.

El partido "pone el foco en el Turia"

En las últimas horas distintos miembros de la dirección de Podemos han sacado el tema de Melilla a relucir. Es el caso de Rafael Mayoral, que este lunes cargó directamente contra el Acuerdo del Turia este mismo lunes, y lo hizo desde Canal Red, la televisión de Pablo Iglesias. “Lo que ha puesto en el foco son las condenas previas, que las ha habido”, destacaba el diputado, que apuntaba que la investigación “pone en el foco a ese Acuerdo del Turia, donde se sentó alguien que tenía una condena firme”. 

“No sé hasta qué punto todas esas organizaciones que estaban ahí, cómo lo ven”, se preguntaba Mayoral, que recordaba un supuesto vídeo en que Errejón felicitaba al líder de Coalición por Melilla: “Son esas cosas que uno no sabe qué decir…son cosas que pasan cuando no se configuran como proyecto político sino como un agregado”.

Hizo lo propio el diputado y miembro de la dirección Pedro Honrubia, que lo empleó también para deslizar la ya habitual a Díaz y Errejón de connivencia con los medios. “Si Podemos hubiera pactado con el partido de Melilla involucrado en el tema del voto por correo, ¿de qué se hubiera hablado más ayer y hoy”?, se preguntaba. “¿de Vinicius y el racismo o de Podemos y ese partido?”, continuaba el dirigente. “El caso es que de lo segundo y su relación con otro partido, ni se ha hablado”, censuraba en Twitter.

Podemos culpa a las “políticas de violencia”

Más allá de la investigación sobre el partido melillense, la cúpula de Podemos también dio este martes su punto de vista sobre la compra de votos en Melilla, y responsabilizó de lo ocurrido a las “políticas de violencia y racismo” que a su juicio se despliegan allí. 

En un comunicado del área de Internacional de Podemos, los morados pedían la investigación por “el escándalo de la compra de votos en Melilla” y apuntaba a que “el abandono sobre Melilla, la externalización y violencia en la gestión de fronteras y otros intereses económicos han abonado esta situación”.

En este sentido, el partido defiende que “las políticas de violencia y discriminación suplen a las de bienestar”, provocando “empobrecimiento y falta de confianza en la política”, algo que “facilita la aparición de estas situaciones”.