Rita Almela: "Las mujeres sabemos repensar las empresas para la tecnología"

Tiene olfato para los negocios, domina la tecnología y busca su aplicación práctica a través del emprendimiento. Lo hizo en Silicon Valley y lo hace ahora en Barcelona. Rita Almela (Barcelona, 1983), socia fundadora de Redwoods Dynamics, preside la Asociación Española de Directivos en Catalunya y es miembro de la junta directiva del Cercle d'Economia, además de consejera de CaixaBank Payments & Consumer. 

¿Qué hace una economista y ex Garrigues reconvertida en emprendedora e inversora en transformación digital, innovación y tecnología?

Soy economista sí, pero en la universidad fundé una startup de tecnología, con un compañero de clase, una plataforma que gestionaba publicidad para telefonía móvil, CPM Telecom. El Instituto de Empresa de Madrid nos seleccionó para participar en un programa de formación para emprendedores. De ahí salté al área de capital riesgo de La Caixa y me dediqué a identificar proyectos innovadores y tecnológicos. Seguí formándome, con un MBA, y entré en Garrigues en el área de asesoría fiscal a empresas. Ahí aprendí mucho sobre las grandes sociedades mercantiles, de todos los sectores, y sobre las estrategias comerciales. Descubrí que lo me apasionaba eran las startups. Creé otra empresa, AlmaShopping, que durante siete años operó una plataforma de comercio electrónico de productos cosméticos. Empecé desde Latinoamérica, primero, y después me mudé a Estados Unidos, a San Francisco.

Una de las grandes cunas del emprendimiento.

Sí. Viví tres años en San Francisco, lo que me permitió conocer desde dentro el ecosistema emprendedor de una ciudad donde hay de todo y, además, en constante ebullición. Se crean empresas de otra manera, mucho más ágil, y con una inversión, tecnología y búsqueda de sinergias mucho más elevadas.

Volvió a Barcelona en 2017, ciudad que también se ha hecho un sitio en el mapa internacional de las startups.

Sí, se ha posicionado como un ecosistema potente, de ámbito local e internacional, sobre todo en el área de la innovación. Cada vez hay más startups y más inversores en este ámbito, tanto del sector público como del privado. Además, las grandes corporaciones trabajan con las empresas emergentes para incorporar las tecnologías y los modelos de negocio que los emprendedores tienen en desarrollo, algo que es muy positivo. Innovan tanto las pymes como las compañías de mayor tamaño.

"No hay una fórmula mágica de las startups pero es básico centrarse en una primera línea de negocio"

Regresa y crea una ‘factoría’ de startups, 101 Ventures. ¿Por qué? 

Para apoyar la creación de seis nuevas empresas, tras un riguroso proceso de identificación de oportunidades, validación del equipo fundador y del mercado al que se dirige. Así se decide después la inversión que se inyecta en la empresa y el acompañamiento que se hace hasta su venta. Nos centramos en compañías de ciencias de la salud, educación, medio ambiente, agroalimentación e inmobiliario. Siempre buscamos aplicar tecnologías avanzadas para mejorar procesos, optimizar recursos o crear nuevos negocios dentro de un sector más tradicional. Ha sido un proceso muy divertido, en el que hemos aprendido mucho y que ha funcionado muy bien.

¿Ha encontrado la fórmula del éxito de las startups?

No creo que exista. Pero sí hemos comprobado que es importantísimo focalizarse en consolidar una primera línea de negocio y tecnología y luego ampliar a diferentes servicios. Cuando creas una startup y te van bien las cosas, quieres abarcarlo todo. Pero no es sencillo hacerlo y con pocos recursos disponibles, como sucede en la fase inicial.

Finalmente funda Redwoods Dynamics, una empresa de soluciones robóticas. ¿Es la actividad con más potencial?

Ahora existe una oportunidad. Las empresas han entendido ya el poder de la digitalización y de la tecnología, que hacen más eficientes los procesos y la operativa diaria. La innovación ya no es solo un laboratorio, una parte de la compañía, sino una actividad que afecta a todas las áreas de forma transversal. Ahora se trata de ir más allá con la inteligencia artificial, el internet de las cosas, el 5G y la robótica. En este sentido, toda automatización que podamos añadir a las empresas crea valor y genera más eficiencia.

¿Qué aportan las mujeres en este contexto a una actividad generalmente ocupada por hombres?

Estamos ante una oportunidad de aplicar estas nuevas tecnologías para ganar en eficiencia, optimizar procesos o crear nuevas líneas de negocio, como le decía antes. Ya no hablamos de inventar robots o plataformas, sino de su ejecución y puesta en funcionamiento. Eso las mujeres lo hacemos muy bien. Tenemos ese sentido de organización, de impulso, de creatividad y de diseño, que funciona muy bien a la hora de detectar la necesidad de aplicar estas tecnologías. Sabemos repensar las empresas en este sentido y dar un paso adelante más. En momentos de cambio y de disrupción, como los de ahora, la mujer debe desempeñar un papel relevante.

"Los bancos han de ser innovadores y a la vez cautos contra el fraude"

Preside el consejo de la Asociación Española de Directivos en Catalunya. ¿Promueven la visibilidad y el empoderamiento de la mujer?

Sí, además de realizar acciones de mentoría, buscamos que las mujeres participen en actividades, eventos y ponencias, donde siempre hay más hombres. Que se note que se puede ocupar una posición de liderazgo. Visibilizar es clave.

¿Cree que las cuotas son necesarias?

Prefiero que las empresas adopten un marco y unas prácticas que fomenten la igualdad. Es esencial considerar perfiles de mujeres con las capacidades necesarias para puestos clave en las promociones, planes de sucesión y nuevas contrataciones. No se ha de asignar a una mujer un cargo si no es por su mérito. Se debe fomentar un entorno y cultura que permita alcanzar estos cambios de modo natural y a corto plazo. La diversidad aporta valor a las empresas.

Forma parte del consejo de CaixaBank Payments & Consumer ¿Cómo están los bancos en pagos y digitalización?

La tecnología está permitiendo hacer mucho más eficientes todos los procesos y las experiencias con los consumidores y a la vez crecer en actividad. Ello obliga a reforzar la parte de riesgo, los posibles fraudes. Los bancos han de ser muy cautos a la hora de aplicar la tecnología pero a la vez muy innovadores. Es un equilibrio interesante de seguir y uno de los grandes retos del sector.

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