Las medidas imprescindibles para evitar el colapso de las pensiones en España

El aumento de la esperanza de vida de la población española, así como un menor número de nacimientos, entre otras cosas, ha puesto en entredicho el sistema de pensiones estatal, algo que ha obligado al Gobierno a tomas cartas en el asunto y, a través de una serie de reformas, tratar de evitar su colapso. Aun así, expertos como Rafael Puyol, catedrático de Geografía Humana de la Universidad de La Rioja, creen que las medidas adoptadas no serán suficientes para conseguir el objetivo de sostenibilidad de las pensiones.

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Según Puyol la solución pasaría por establecer un sistema mixto: por una parte el Estado seguiría pagando una pensión, al menos básica; por otra, habría un sistema de capitalización en el que se incentivase el ahorro de los cotizantes.

Lo ideal sería que, en el futuro, con el ahorro generado, los cotizantes pudieran tener una pensión digna, ha explicado en una entrevista con EFE

"Si solo se continúa con el sistema de reparto actual, el desequilibrio entre cotizantes y pensionistas va a ser tan fuerte que, o se van a reducir mucho las pensiones, o no va a haber dinero para sostenerlas", ha advertido.

El mercado del trabajo en España, ha indicado, va a tener unas características distintas de las que tiene actualmente y esos rasgos están relacionados con la composición general del país.

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Habrá menos jóvenes en el mercado laboral y con una edad más avanzada, más mujeres porque todavía mantienen una situación de inferioridad respecto de los varones y habrá, igualmente, más inmigrantes, ha argumentado este especialista.

El experto sostiene sostiene que con el actual sistema de reparto, el número de cotizantes cada vez va a ser más pequeño y el número de personas que cobran una pensión cada vez va a ser más elevado.

Incentivar el retraso de la jubilación

Puyol también ha asegurado que el envejecimiento de la población puede plantear oportunidades y aboga por que se incentive el trabajar más allá de la edad ordinaria de jubilación: "Tendremos que pensar, de una vez por todas, que las personas, a partir de los 65 años o de la edad de jubilación, muchas de ellas pueden seguir trabajando".

Será preciso, ha indicado, incentivar ese trabajo, con carácter voluntario, no para todas las profesiones, ya que "habrá trabajadores que se tendrán que jubilar antes por las características de dureza de su trabajo, pero sí, por ejemplo, para los que trabajan en el área de los servicios, que podrán seguir trabajando".

Integración de inmigrantes

Por otra parte, y ante ese envejecimiento de la población española, Puyol defiende la promulgación de "una buena ley que permita la integración de los inmigrantes en la sociedad española".

"Hasta ahora -ha subrayado- (los inmigrantes) no han dado demasiados problemas y España no es un país con un rechazo, una discriminación, una xenofobia o un racismo fuerte, afortunadamente, lo que hay que mantener así en el futuro".