Borges aumenta su volumen de negocio hasta los 700 millones y pone en marcha un plan para seguir creciendo

Año de crecimiento desde prácticamente cualquier óptica y nueva etapa en un horizonte muy cercano. La empresa agroalimentaria catalana Borges cierra el ejercicio fiscal que, en su caso, se alarga hasta mayo del 2022, con incremento de ingresos, beneficios y toneladas vendidas. Fueron, según los datos presentados este miércoles, más de 360.000 toneladas de producto comercializadas, una cantidad que se tradujo en una facturación de 701 millones de euros (un 25,6% más que en el ejercicio anterior) y 27,5 millones de euros de ganancias netas, casi un 8% más que el año previo.

Estos volúmenes, que todavía se quedan por debajo de las cifras récord de 2018 y que aún no reflejan del todo el impacto de los meses que más se ha disparado la inflación, han servido a la empresa precisamente para capear un temporal que, en cambio, sí creen que incidirá en su radiografía económica del ejercicio 2022-2023. "La complejidad del periodo debido al alto impacto de costes no trasladados en gran parte al consumidor impactarán inevitablemente en los resultados de este ejercicio en curso", confiesa, en el comunicado que resume los resultados financieros, el presidente ejecutivo y consejero delegado de la compañía, David Prats.

En cualquier caso, esto no altera los planes de esta empresa productora de aceites, vinagres y frutos secos, que celebra este año su 125 aniversario; estrena, tras una inversión de 5 millones de euros, el Mas de Colom como nueva sede institucional en Tàrrega (Urgell); y pone en marcha un nuevo plan de crecimiento. La estrategia es invertir 108 millones de euros en los próximos tres años en activos industriales y en marketing (un paquete que incluye 30 millones de euros en mejorar la eficiencia energética de sus centros productivos), y alcanzar de cara a 2028 un volumen de negocio que supere los 1.000 millones de euros.

Expansión internacional

"La ambición del grupo, en el plazo de cinco años, es superar los 1.000 millones de euros de facturación, doblar resultados y sobrepasar la venta de 100.000 toneladas de productos con marca propia, sin olvidar la apuesta por la proactividad en el crecimiento inorgánico", expone la compañía en este mismo comunicado. Además, la empresa está estudiando la posibilidad de "seguir expandiendo su presencia internacional" abriéndose campo a través de África.

En el ejercicio fiscal que va de mayo del 2021 a mayo del 2022, un 65% de los ingresos de Borges han venido de ventas al mercado internacional, con Francia, Estados Unidos, Brasil e India a la cabeza. En este sentido, aproximadamente el 40% de producto vendido en total son harinas y, el resto, se distribuye entre aceites de semilla, aceite de oliva, frutos secos y vinagres, aceitunas, pastas, salsas y encurtidos.