El activismo medioambiental y varias huelgas ponen la zancadilla a Amazon en su día estrella

Una quincena de centros parcialmente bloqueados y miles de puestos de trabajo sin cubrir. El gigante del comercio electrónico Amazon ha llegado a la mitad de la que es su jornada estrella, el Black Friday, con varios frentes abiertos. Los más importantes se han concentrado en Alemania (el mercado más importante para la compañía después de Estados Unidos) y en el Reino Unido. En el primero, más de 2.500 trabajadores se han sumado a una huelga convocada por la organización sindical alemana ver.di. En el segundo, varios activistas medioambientales han intentado interrumpir la actividad en hasta trece centros propiedad de esta empresa fundada por Jeff Bezos.

"El Black Friday personifica una obsesión por el consumo excesivo que no es compatible con un planeta habitable", ha justificado el grupo Extinction Rebellion, responsable de estos bloqueos. "Amazon y empresas de su estilo han capitalizado nuestro deseo de conveniencia y han avivado el consumismo desenfrenado a expensas del entorno natural", han añadido.

Según recoge Reuters, el grupo ha llevado a cabo por ejemplo manifestaciones que han bloqueado la entrada del centro que Amazon tiene en los muelles de Tilbury (en Essex, Inglaterra), y también han logrado interrumpir parcialmente la actividad de otros dos centros de Amazon fuera del país, concretamente en los Países Bajos y en Alemania. Sin embargo, Amazon ha reducido el impacto asegurando, según la misma agencia, que tienen una amplia red que les permite minimizar cualquier potencial interrupción del servicio.

Pero esta actuación ha coincidido en el país germano con una huelga convocada para reivindicar mejoras en las condiciones económicas de los repartidores y de los trabajadores de los almacenes. En este caso, la movilización se ha concentrado sobre todo en los almacenes en Rheinberg, Koblenz y Graben. Han respondido también al parón algunos almacenes en Francia y en Italia, aunque en este caso no se han dado cifras de seguimiento.

Actuaciones en España

En el caso de España, las reivindicaciones de este estilo han sido más bien simbólicas. Greenpeace ha cubierto los escaparates de grandes cadenas como H&M, Primark, Mango o Lefties de la Gran Via de Madrid con carteles en los que se leía "Sin stock. Planeta agotado". Por la parte laboral, la filial catalana de CCOO ha publicado un comunicado en el cual pide a los empresarios "un trabajo digno y estable" durante esta campaña y a la ciudadanía, que realice un consumo responsable.

El sindicato alerta, en este sentido, de que la actividad en la que se sumerge ahora el sector comercial comporta "consecuencias negativas para la vida y la salud de los trabajadores". Según denuncia CCOO se producen largas jornadas de trabajo sin descansos ni planificación, con un exceso de las horas recogidas en los contratos para suplir "las plantillas insuficientes".