El Banco de España avisa de un próximo endurecimiento del crédito

rosas54732830 hernandez de cos gobernador banco espana santander200901220046

rosas54732830 hernandez de cos gobernador banco espana santander200901220046 / periodico

Rosa María Sánchez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La recuperación ecónomica ha empezado, pero es «incompleta y desigual por sectores y agentes», y además está sometida «a un elevado grado de incertidumbre por las dudas sobre la propia evolución de la pandemia, como muestran los nuevos brotes». Como resultado de todo ello, según el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, «parece claro que algunos de los efectos de la pandemia serán persistentes».

Durante su intervención en el seminario organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) en la UIMP, el gobernador subrayó que el flujo de crédito desde las entidades financieras a las empresas tras el estallido de la pandemia ha sido un factor fundamental para mantener el latido de su actividad. "Hasta el momento, el sistema financiero está actuando como factor mitigador, y no amplificador, del impacto de esta crisis", certificó.

Sin embargo, advirtió que esto puede cambiar a partir de ahora, y que se avecina un endurecimiento de los créditos, según se desprende de loexpresado por las entidades financieras en las encuestas del Banco Central Europeo (BCE).

El 70% de las empresas, con ahogos

Y este endurecimiento va a llegar al mismo tiempo en que muchas empresas se van a enfrentar a problemas de liquidez y de posibles incumplimientos en el pago de sus deudas. «Las tensiones de liquidez pueden derivar eventualmente incluso en problemas de solvencia", indicó. El Banco de España estima que el porcentaje de empresas que van sufrir necesidades de liquidez hasta final de año va a aumentar en casi 10 puntos, hasta situarse en el 70% de ellas. Según el análisis el regulador, el 50% de estas necesidades podrán ser cubiertas con recursos de las propias empresas; pero la otra mitad, no.

Por eso llamó a mantener durante el tiempo que sea preciso la red de seguridad de avales de los créditos ICO y de expedientes de regulación temporal de empleo (ertes) "hasta que tengamos una vacuna" y se pueda garantizar un retorno a la normalidad de la actividad económica. También subrayó la conveniencia de mejorar "los procesos de reestructuración, insolvencia y alivio de la carga financiera de las empresas" para evitar que mueran las que aún son viables

De cara a los Presupuestos para el 2021, el gobernador consideró que deberán "expansivos" desde el punto de vista del gasto, para seguir apoyando la recuperación, si bien demando que desde ahora se adopte el plan de reducción de la deuda que deberá aplicarse cuando se recupere la actividad.

El gobernador llamó a alcanzar "acuerdos amplios" políticos y sociales que den respaldo a la política presupuestaria y de reformas que debe acometer el Ejecutivo para lograr una estrategia de crecimiento "a la que el sistema financiero puede y debe contribuir"

Aumento de la morosidad

La enorme preocupación del Banco de España por la salud financiera y patrimonial de las empresas tiene que ver con el temor a que un impago amplio de las deudas haría aumentar los ratios de morosidad de las entidades financieras (ya en aumento). Ello podría desencadenar una espiral de endurecimiento definitivo del crédito y posterior estrangulamiento de la actividad, como pasó en la anterior crisis financiera ('credit crunch'). Eso es lo que pretende evitar el Banco Central Europeo (BCE) con sus medidas de política monetaria desde el primer momento de la pandemia, y es el aviso que ayer dejó el gobernador del Banco de España en su intervención telemática en la Universidad de Verano de Santander.

"Todos debemos compartir el objetivo de evitar que la crisis actual venga acompañada de un endurecimiento generalizado de las condiciones de financiación o que dañe gravemente nuestro sistema financiero", advirtió.

Para prevenir este aumento de la morosidad, las entidades financieras españolas han ido aumentando sus provisiones, hasta el punto de que las cotizadas presentaron unas pérdidas totales de 10.500 millones de euros en la primera mitad del año, frente a unas ganancias de similares en el mismo periodo del 2019.

Pero el gobernador mostró su preocupación por el previsible aumento de la morosidad que se destapará en el momento en que finalicen las moratorias o cuando venzan la carencia de los préstamos avalados. Las entidades financieras han concedido a empresas y familias más de 1,3 millones de moratorias de entre tres meses y un año, que representan un saldo de crédito suspendido de casi 45.000 millones de euros (el 7% del total de la cartera).