En Directo

El aeropuerto de Barcelona se libra del caos pese a la huelga de vigilantes

Acceso al filtro de seguridad en el primer día de huelga de vigilantes en el aeropuerto de Barcelona.

Acceso al filtro de seguridad en el primer día de huelga de vigilantes en el aeropuerto de Barcelona. / periodico

Guillem Sànchez / Josep M. Berengueras

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

No hubo caos. A diferencia de lo que sucedió hace dos años con la huelga de Eulen, este viernes, en el primer día del paro indefinido convocado por los empleados de la empresa encargada de los controles de seguridad del aeropuerto de Barcelona (Trablisa), la jornada transcurrió con relativa tranquilidad. Los viajeros tuvieron que hacer un poco más de cola de la habitual, pero los servicios mínimos del 90% hicieron que las esperas fueras asumibles, con un máximo de 40 minutos en el peor de los casos. La huelga, eso sí, continúa, por lo que no se descarta que haya jornadas peores.

«Con un 90% de servicios mínimos... aunque sigas la huelga, solo la puedes seguir moralmente mientras vas pasando maletas», denunció la presidenta del comité de huelga de Trablisa, Genoveva Sierra. Los convocantes del paro ya habían avisado de que era «prácticamente imposible» que se notase la incidencia del paro por los servicios mínimos dictados, y es más o menos lo que sucedió este viernes: hubo viajeros que acudieron a la terminal varias horas antes de lo que lo hubiesen hecho en caso de no haber huelga; que se juntaron con los que no sabían ni que había paro. Había más personal de información en el aeropuerto, y Aena se había preparado para gestionar colas más largas. Ello, sumado a la apertura con normalidad de todos los filtros, supuso que como máximo las esperas fueran de 30 minutos en la T-1 y de 40 en la T-2.

Medidas

Según los sindicatos, eso fue posible gracias a diversas irregularidades. Por ejemplo, el representante del comité de huelga Fidel Gómez aseguró que la empresa había traído trabajadores de otros aeropuertos («hay dinero para pagar el doble a gente de Mallorca cuando está diciendo que no hay dinero para nuestras demandas, es algo surrealista», lanzó). También, que se había «preferido reducir la gente en los filtros y abrir más para dar más velocidad de paso», algo que impidió que se cumpliese con algunos protocolos de seguridad, como los controles aleatorios de explosivos. Por último, denunció que hubo más presencia de lo normal de guardias civiles detrás de los filtros.

Al otro lado, la directora de Recursos Humanos de Trablisa, Pilar Albacete, afirmó que se produjo un «funcionamiento normal» en los filtros de seguridad el aeropuerto, y aunque  admitió que puede que hayan venido trabajadores de Trablisa de otros aeropuertos para estos días, enfatizó que no se está sustituyendo a trabajadores en huelga: «Pueden haber venido con antelación, como vinieron el fin de semana pasado», dijo, antes de reiterar que se trata de una huelga «abusiva e ilegal».

Por su parte, la ministra de Trabajo en funciones, Magdalena Valerio, afirmó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el Gobierno no tiene previsto recurrir a la figura del laudo arbitral para resolver la huelga, y confió en «que se respeten los servicios mínimos y el derecho a huelga, pero con respeto a la normativa vigente».

Sin fecha

De momento, no hay prevista una nueva reunión entre los trabajadores y la empresa, y la convocatoria de huelga sigue presente. Este sábado se espera que pasen por el aeropuerto alrededor de 160.000 personas, y el domingo, otras 180.000, con unos mil vuelos (entre salidas y llegadas) para cada uno de los días. Aena y las aerolíneas recomiendan acudir con antelación a la terminal correspondiente por si la situación empeora.

Normalidad en el aeropuerto de El Prat el primer día de la huelga de vigilantes

Normalidad en el aeropuerto de El Prat el primer día de la huelga de vigilantes. / periodico

Así os hemos contado la primera jornada de huelga en el aeropuerto de Barcelona.