El TSJC asume el "rotundo fracaso" de los juzgados de cláusulas suelo

El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Jesús María Barrientos, ha calificado este viernes de "rotundo fracaso" las medidas adoptadas para resolver las demandas sobre cláusulas suelo en los juzgados, los cuales considera que tardarán "años" en tramitar todos los litigios acumulados.

Durante la inauguración del nuevo Centro integral de Resolución Alternativa de Conflictos (ADR), Barrientos ha alertado sobre la falta de cultura de pacto entre los jueces españoles y los problemas que ello conlleva, como el aumento progresivo de la tasa de litigiosidad, que ya se sitúa en 120 litigios por cada 1.000 habitantes.

Pese a este "fracaso", el presidente del TSJC se ha mostrado optimista de cara al futuro con la apertura de este nuevo centro en Barcelona, cuyos éxitos cree que beneficiarán a ciudadanos y abogados a partes iguales.

Por su parte, durante el acto inaugural del centro, la decana del Colegio de la Abogacía de Barcelona (ICAB), Maria Eugènia Gay, ha transmitido su deseo de que Barcelona se convierta en una capital de la mediación a nivel internacional, como Nueva York, Londres o París.

El centro ADR, que cuenta con cerca de 700 mediadores y más de 100 árbitros, tiene como objetivo principal fomentar, difundir y consolidar la mediación y el arbitraje entre la abogacía y la ciudadanía.

Juzgados colapsados

Las demandas presentadas en los cuatro juzgados únicos en toda Catalunya habilitados expresamente para resolver reclamaciones sobre cláusulas hipotecarias abusivas colapsan  estos juzgados, que se pusieron en marcha en junio de 2017 a raíz de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que dejaron sin efecto las cláusulas suelo.

El propio Barrientos advertía recientemente de que, según sus cálculos, se tardarán cinco años en resolver las demandas actualmente presentadas en Catalunya por cláusulas bancarias abusivas como las cláusulas suelo. Al presentar la Memoria judicial del 2018, Barrientos ha explicado que en lo que va del 2018 se han presentado 20.018 demandas (15.219 en Barcelona) cuando el año pasado fueron 18.078, unas cifras que han llevado al sistema de justicia civil "a una situación de colapso que tiene un pronóstico muy negro".