el cambio tecnológico

Una casa de impresión

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Max Jiménez Botías

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Be More 3D puede considerarse un bicho raro en el entorno de la feria dedicada a las 'protech' que impulsa el Consorci de la Zona Franca de BarcelonaInmotecnia Rent muestra en la Fira de Muntjuïc las novedades tecnológicas relacionadas con el sector inmobiliario. En su mayor parte las empresas expositoras 'venden' servicios --una visita virtual a una casa en venta, inteligencia artificial aplicada al sector, 'marketplaces' o domótica se incluyen entre la oferta--. Sin embargo, Be More, vende un producto concreto. O mejor dicho, vende tres: la primera impresora de hormigón en 3D fabricada en España, el hormigo que necesita ese dispositivo tecnológico para crear esa estructura y, por supuesto, la casa ya construida a partir del procedimiento tecnológico, cuyo efecto supone una rebaja del 35% del coste final y una reducción del tiempo total de ejecución. "Una estructura puede levantarse en  24 horas", afirma Vicente Ramírez, consejero delegado de la empresa valenciana constituida al amparo de la Universitat Politècnica de València (UPV).

"Nuestro primer 'hit' fueron 1.500 llaveros con el lema 'I Love Caloret', cuando Rita Barberà hizo famoso el término. Conseguimos algo de dinero e hicimos las primeras piezas, componentes de segunda mano para hacer el primer prototipo --que construimos hace tres años--, de una impresora de hormigón en tres dimensiones. En esa fase invertimos unos 3.500 euros", explica Ramírez. Con el prototipo en la mano fueron a la Politècnica, donde realizaron pruebas con materiales durante dos años. "Al final entramos en la primera aceleradora de 'start-ups' de Acciona. Conseguimos algo de capital (25.000 euros) y con ese dinero rediseñamos el prototipo e hicimos la primera impresora en 3D y la primera casa impresa en 3D en tan solo tres meses", describe así el proceso Ramírez.  

Durante el próximo año, la firma valenciana espera levantar una veintena de casas impresas en 3D

La impresora no hace magia. Crea la estructura de una vivienda, que son los muros de carga y sobre esos muros se viste la casa. Sobre ellos descansa la cubierta y sirven de elemento portante para los revestimientos e instalaciones. "Con esto conseguimos promover empleo en el sector promotor porque hacemos la estructura en 24 horas, pero luego tienen que entrar otros profesionales del sector a acabar la casa", explica Ramiréz.

La sociedad fue constituída hace tres años por su actual consejero delegado y otros cuatro socios, compañeros de estudios en la UPV y ahora comienza la fase de comercialización. En los últimos meses ha recibido no pocas muestras de interés entre el sector constructor en España y Latinoamérica. Además tiene un acuerdo con la cementera Cemex, que se encarga de aportar el material --hormigón-- para la impresión. El plan de negocio de Be More establece que durante el próximo año levantará unas 20 casas. "Con 10 alcanzamos el punto de equilibrio. A partir de ahí conseguimos beneficios", apunta Ramírez.