En febrero

La inflación sube hasta el 1,1% por el alza de la electricidad

El IPC aumenta cinco décimas respecto al mes de enero en el conjunto de España y dos décimas en Catalunya, debido al encarecimiento de la electricidad

ipc-febrero-2018

ipc-febrero-2018 / periodico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El índice de precios de consumo (IPC) se situó en febrero en el 1,1% interanual, cinco décimas por encima de la subida de precios de enero, que fue del 0,6 %, debido al encarecimiento de la electricidad, que el año pasado se abarató. En Catalunya este índice ha subido dos décimas en febrero respecto a enero, y la tasa interanual ha escalado cinco décimas, hasta el 1,4%.

Según los datos que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE), el IPC acumula diecisiete meses consecutivos en positivo, aunque se sitúa en una línea más moderada que la media anual del 2% que se registró en el conjunto de 2017.

En tasa mensual, el IPC registró en febrero un ascenso del 0,1%, frente al descenso del 1,1% que marcó en enero y del 0,4% que contabilizó en el mismo mes del año pasado. El índice de precios de consumo armonizado, que mide la evolución de los precios con el mismo método en todos los países de la zona del euro-, se situó en febrero en el 1,2%, cinco décimas por encima del registrado el mes anterior. Otro indicador, el IPC a impuestos constantes (IPC-IC), se situó en el 1,1%, la misma que el índice general. 

Catalunya es junto con las Islas Canarias la comunidad con una tasa interanual más alta, ambas con el 1,4%, mientras que en el extremo opuesto se sitúa Ceuta, con el 0,3%.

{"zeta-legacy-image-100":{"imageSrc":"https:\/\/www.elperiodico.com\/es\/ext_resources\/infographics\/2018\/marzo\/w-ipc.jpg","author":null,"footer":null}}

Sube la luz, bajan las hortalizas

En concreto, los precios de la vivienda registraron en febrero un incremento interanual del 1,4% (frente al descenso del 2 % mes pasado), debido al encarecimiento de la electricidad, que el año pasado se abarató, y pese al descenso de precios del gasóleo para calefacción.

El ocio y la cultura aumentaron sus precios el 0,6%, frente al descenso del mes pasado, debido a un mayor encarecimiento de los paquetes turísticos. Los mismo ocurrió con los precios de las comunicaciones, que aumentaron el 2,3% (casi un punto y medio más), por un mayor encarecimiento de los servicios empaquetados de telefonía; y los de otros bienes y servicios (el 0,8% con cuatro décimas más), por el alza de los artículos y productos para el cuidado personal.

Entre los grupos que ejercieron una influencia a la baja de los precios destaca el transporte, que moderó siete décimas el crecimiento hasta el 1,1% por el abaratamiento de los carburantes. También afectaron los alimentos y bebidas no alcohólicas, cuyos precios crecieron el 0,9% (cuatro décimas menos), debido a que las legumbres y hortalizas se abarataron este año, mientras que el año pasado se encarecieron.

Una inflación que no llega a los salarios

El sindicato UGT ha aprovechado los datos del INE para denunciar que la inflación no llega a los salarios, ya que las remuneraciones han crecido dos décimas, mientras el IPC ha crecido el 2% de media. Es decir, los trabajadores han perdido 1,8 puntos de poder adquisitivo.

En el mismo comunicado denuncian que en el 2017 las rentas salariales y las pensiones han vuelto a perder poder adquisitivo, mientras los beneficios empresariales crecen a un ritmo del 5,2% y superan "con creces" los niveles anteriores a la crisis.

En términos similares se ha pronunciado el otro sindicato mayoritario, CCOO, que en un comunicado ha denunciado que el crecimiento económico se mantiene gracias a la demanda externa y sus beneficios no llegan a la sociedad y generan "pocos empleos". Lo que según su parecer implica una "fuerte pérdida de poder de compra de salarios y pensiones". Una situación que, en su opinión, se debe combatir con la negociación colectiva y con medidas en materia de pensiones.

Asimismo, la previsión de inflación media para 2018 se sitúa en el 1,6%, mientras la negociación colectiva recoge un incremento salarial del 1,51%, es decir, que esas subidas salariales, que son las únicas que han mantenido un cierto crecimiento durante la crisis, reflejan una pérdida media de poder de compra.