Las desigualdades de género dejan de reducirse en Catalunya

Las desigualdades de género, que hasta el 2016 se iban reduciendo, han dejado de recortarse e incluso aumentan en algunos sectores como el de las Tecnologías de la Información, según un estudio de la Cámara de Comercio de Barcelona y el Observatorio Mujer, Empresa y Economía.

El informe 'Indicador de igualdad de género de Catalunya 2017', que se presenta este lunes en el Institut d'Estudis Catalans (IEC) y al que ha tenido acceso EFE, revela que el sector de las tecnologías de la información y comunicación (TIC) es el que muestra mayores desigualdades, retrocediendo en aspectos como la brecha salarial en puestos directivos.

El estudio tiene en cuenta 28 indicadores parciales, agrupados en los bloques de "formación, mercado de trabajo, sector TIC y R+D, condiciones de vida y empoderamiento", y reflejan su evolución a largo plazo, en los últimos 12 años, y a corto, los últimos dos años.

Formación sin recompensa

Una de las conclusiones es que "los avances son demasiado lentos" y que "en los dos últimos años se ha frenado el proceso de reducción de las desigualdades globales", por lo que es necesario "hacer políticas públicas activas". En concreto, los indicadores de formación señalan que "las mujeres tienen una formación superior a la de los hombres, ya que el 57 % de las personas con titulaciones universitarias son mujeres".

En el mercado laboral, "hay más mujeres ocupadas con estudios superiores que hombres con la misma titulación, pero el nivel formativo más elevado no se traduce en una reducción de las desigualdades en el mercado laboral".

Vocaciones tecnológicas

Según los resultados por sector económico, el ámbito de las TIC y de investigación y desarrollo "no han hecho avances en la reducción de las desigualdades en los últimos dos años", por lo que "es necesario fomentar las vocaciones tecnológicas entre las mujeres para evitar esta brecha económica".

En cuanto a las condiciones de vida de las mujeres, el indicador revela que "la crisis ha afectado más a las mujeres a causa de una mayor precariedad en las condiciones económicas, que ha hecho aumentar el riesgo de pobreza femenina". La adquisición de poder por parte de las mujeres sigue siendo desigual, según el informe, al haber "retrocedido en la presencia en puestos directivos, brecha salarial de directivos, miembros de junta en instituciones y cátedra".