¿Quién convoca la huelga general?

La convocatoria de huelga general en Catalunya ha servido para que muchos trabajadores descubran los sindicatos minoritarios que impulsan los paros. En el caso de la huelga del 8 de noviembre, la convocatoria la hizo Intersindical-CSC (Confederació Sindical Catalana), una central que se declara como independentista y que en el último recuento oficial contaba con 223 delegados elegidos en elecciones sindicales en empresas. [Sigue al minuto las últimas noticias sobre la huelga general en Catalunya.]

El sindicato I-CSC concentra la mayor parte de sus delegados en las empresas privadas, con 197 representantes, así como en la provincia de Barcelona, con 145 delegados elegidos por trabajadores, seguida de Girona (32), Tarragona (17) y Lleida (3), según los datos del Departament de Treball correspondientes a diciembre del 2015. En la Administración cuenta con 26 representantes. La central forma parte de un grupo de decenas de pequeños sindicatos que se reparten un 7,61% de los 46.605 delegados sindicales de Catalunya.

A mucha distancia de CCOO y UGT

La distancia con los principales sindicatos es abismal. CCOO encabeza la lista con 19.737 delegados elegidos, lo que representa el 42,35% del total, seguido de UGT (18.575 delegados, el 39,86%), la Unió Sindical Obrera (2.350 delegados, el 5%) y la CGT (1.157 delegados, el 2,48%).

El sindicato se define como "la primera fuerza sindical de obediencia nacional", con especial incidencia en las comarcas del Vallès, Garrotxa, Maresme, Selva y Garraf y los sectores de enseñanza, aguas, banca, metal, administraciones, química y universidades, entre otros.

Secretario general condenado por terrorismo

En los últimos días, en las redes sociales se ha recordado el pasado del secretario general de I-CSC, Carles Sastre, que fue condenado a 30 años de prisión por el atentado mortal contra el empresario Josep Maria Bultó en 1977 a cargo del Exèrcit Popular Català (Epoca). Sastre fue uno de los condenados en firme por el asesinato. Los condenados entraron en la vivienda de Bultó colocándole en el pecho una bomba y exigiéndole dinero. La bomba estalló tras negarse Bultó a pagar 500 millones de pesetas.