Foment alerta de la pérdida de competitividad por la energía

Foment del Treball ha alertado del riesgo de que las empresas pierdan aún más competitividad si no se cambia la política energética. El Fòrum Energia Empresa de la patronal catalana ha llevado a cabo un estudio en el que pide un nuevo marco energético favorable a la industria para no minar su competitividad por el sobrecoste que soporta en la actualidad.

"La industria afronta un nuevo ciclo inversor para garantizar su competitividad futura y para ello necesita que cambien las cosas", ha explicado Virginia Guinda, presidenta del Fòrum. Y uno de los elementos esenciales consiste en "garantizar la seguridad jurídica, otorgando estabilidad y coherencia a la toma de decisiones en materia de política energética, evitando una evolución errática".

Esa es una de las conclusiones que se han extraído tras una encuesta que respondieron un centenar de compañías ente julio y octubre del año pasado. El 71% contestaron que preveían realizar un cambio tecnológico en los cinco años próximos, orientado a mejorar la intensidad energética (que calcula las unidades de energía necesarias por unidad de producto interior bruto), "si se dan las condiciones de estabilidad normativa a medio plazo".

Según el estudio, completado luego con entrevistas con directivos de los principales ramos de la industria y los servicios, solo el 6% estaría dispuesto a trasladar su producción o parte de ella por los extracostes energéticos que soporta. 

UN 25% MÁS

Pero "el problema no es tanto el de las empresas que se quieren marchar, sino de las inversiones que perdemos por el gasto energético. Si una empresa quiere establecerse, por ejemplo en el complejo petroquímico de Tarragona, contará con que el gasto energético es un 25% superior a otras regiones de Europa, por lo que estas posibles oportunidades de inversión se podrían perder", Jesús Manso, de CLH, uno de los participantes en el estudio.

En la misma línea, Alba Cabañas, directora técnica de Foment, advierte de que "este sobrecoste energético puede suponer que no vengan nuevas inversiones". El estudio destaca que el 71% de los encuestados consideran clave la eficiencia energética. "Se ha producido un cambio de paradigma del ahorro a la eficiencia como factor de competitividad", explica.

INCERTIDUMBRE

A pesar de esa necesidad para abaratar costes, existen variables que retraen a las empresas. Y la principal es la incertidumbre de la regulación, que paraliza gravemente las inversiones, según los promotores del estudio. Guinda afirma que "lo relevante es que no basta con invertir en eficiencia". Haya el gobierno que haya una vez que se constituya y se ponga en marcha la legislatura tiene que hacerse un pacto sobre la energía y "tener en cuenta a la industria", añade.

"No nos podemos permitir que no haya cambios. Por el camino por el que vamos no podemos seguir y no se pueden acometer las inversiones necesarias para mejorar la competitividad de la industria", ha advertido.

La patronal aboga por cambiar el modelo de primas a la producción energética por el de incentivos fiscales, así como por "revisar con realismo" el papel de la energía nuclear y del 'fracking' o fracturación hidráulica para obtener hidrocarburos "sin dogmatismos y analizando desde la óptica del coste-beneficio", afirma Guinda.