Escofet, de BCN al mundo

Barcelona es para Escofet el suelo sobre el que ha edificado una historia más que centenaria. La empresa nació en 1886 y creció con el desarrollo de L'Eixample y el mosaico hidráulico con el que se pavimentaron las viviendas. La firma de Sant Vicenç dels Horts consiguió unir tecnología y diseño para convertirse en una referencia para los arquitectos de la época que utilizaron sus baldosas en la mayoría de edificaciones. Pero también la ciudad de Barcelona, cuyas aceras fueron revestidas con el conocido panot de la rosa, gracias a un concurso municipal ganado a principios del siglo pasado. «En esa época sofisticamos la actividad para adaptarla a los movimientos artísticos y a la arquitectura del momento. Estos factores intentamos mantenerlos vivos: tecnología, innovación y diseño», explica Marcos López Antich, director general de Escofet y quinta generación familiar al frente de la compañía.

Barcelona es la base, pero no todo empieza y acaba ahí. Los catálogos de la compañía se imprimían en francés ya en 1900, no por esnobismo, sino porque parte de la producción se exportaba a Francia. «La actividad internacional siempre ha sido básica, y lo sigue siendo», señala López. «Hemos pasado la crisis, entre otras cosas, gracias a la exportación. Antes de llegar a la crisis ya exportábamos casi el 45% de la producción», agrega.

Escofet exporta a unos 40 países de forma regular. En el 2014 facturó 12,5 millones de euros, y la exportación superó los siete millones de euros. «La actividad crece en el exterior de manera muy regular, la velocidad no es muy rápida, pero es consistente», destaca López.

El plan de crecimiento se centra en su mayor parte en el exterior, particularmente en el Oriente Medio. En Catar, se ha adjudicado el proyecto de la Ciudad de la Educación. «Es la más grande del mundo, y nos han encargado todo el mobiliario urbano», cuenta el ejecutivo de la firma. El proyecto ya está adjudicado y la empresa estudia los detalles del contrato para ponerlo en marcha. Desde la planta que tiene en México se propone gestionar el crecimiento en Suramérica y EEUU, uno de los mayores mercados para la compañía.

Pese a la internacionalización, la firma no renuncia a crecer en España. Escofet ganó el concurso para pavimentar el tramo renovado de la Diagonal entre Josep Tarradellas y paseo de Gràcia. El panot diseñado por el arquitecto Esteve Terradas, que reproduce la hoja de plátano, ha sustituido al del 1900. El ayuntamiento le adjudicó el concurso a Escofet y esta aspira a cubrir el tramo hasta paseo de Sant Joan, si el nuevo consistorio asume la ampliación.