Girona, capital de Nescafé

La entrada a Girona huele a café. El aroma procede de la fábrica de Nestlé, que en los últimos años ha ido creciendo gracias a los 236 millones invertidos por la multinacional suiza entre los años 2007 y 2014 en la nueva línea Dolce Gusto. Y seguirá creciendo. El director general de Nestlé en España, Laurent Dereux, anunció una nueva inversión de 102 millones en los próximos dos años con el objetivo de incrementar un 30% la capacidad de producción de café soluble de la marca Nescafé hasta llegar a 30.000 toneladas anuales.

La renovación y ampliación de las instalaciones se encuentra en su fase inicial y concluirá en el 2017, según informaron Dereux y el director técnico de la compañía, Miquel Serra. Las obras servirán para sustituir y ampliar una de las dos líneas de producción actuales y darán trabajo a un máximo de 350 trabajadores y una media de 250 durante el periodo de construcción. La planta ampliará su plantilla, que ahora es de más de 700 empleados, con unas 40 personas cuando entre en funcionamiento la nueva línea.

En el proceso para tomar la decisión, Girona se impuso a otras fábricas candidatas a recibir la inversión de las seis factorías de café soluble con las que cuenta el grupo en Europa. De hecho, una parte de las 8.000 toneladas en las que crecerá la producción procede de una planta de Nestlé en el Reino Unido en la que se ha limitado la inversión a una renovación parcial de las líneas.

«Había competencia interna entre fábricas pero tenemos una credibilidad muy alta en el grupo. La inversión sitúa Girona en posición muy buena para futuras ampliaciones e inversiones», destacó Miquel Serra, que añadió que «la infraestructura existente en Girona ha hecho que la inversión tenga mucho sentido porque es más baja que en otros emplazamientos».

Una vez finalizada la ampliación, la factoría de Girona se convertirá en la más grande de Nestlé en Europa y la tercera de las 30 que tiene en todo el mundo. La producción adicional se destinará íntegramente a la exportación, a la que la planta de Girona dedica actualmente el 74% del café soluble que sale de sus líneas. Desde Catalunya se vende Nescafé a unos 70 países, entre los que destacan el Reino Unido y Japón, dos grandes consumidores de café soluble.

La filial española de Nestlé registró en el 2014 unas ventas por un importe de 2.102 millones de euros, un 1% más que en el 2013. Dereux calificó el resultado del año pasado como «satisfactorio» teniendo en cuenta que el mercado de alimentación no crece y que se vio sometido a una «guerra feroz de precios».