Santiago de Chile, barrio a barrio

Santiago de Chile no es una ciudad que pueda presumir de su patrimonio, malogrado en su mayoría por los constantes terremotos. Pero sí que disfruta de una orografía espectacular. El aterrizaje en el aeropuerto de Pudahuel es emocionante ya que, desde la ventana del avión, se vislumbra una urbe con un resaltado 'skyline' encajada entre dos cordilleras, la de la Costa Chilena y la de los Andes, que han preservado a todo el país de muchas plagas foráneas que azotaron los cultivos de todo el mundo.

La capital chilena, fundada por el español Pedro de Valdivia, luce un urbanismo contemporáneo en el que los centros comerciales y los rascacielos son preponderantes. Destaca la Gran Torre Costanera, en el barrio de Providencia que, con 300 metros, es el edificio más alto de Sudamérica.

La ruta patrimonial y más convencional por el casco histórico suele empezar y acabar en la Plaza de Armas, rodeada de edificios de renombre, incluyendo el Museo Histórico Nacional y la Catedral. Durante el itinerario aparecen el Museo de Arte Precolombino y el histórico Palacio de la Moneda, donde Salvador Allende murió tras el golpe de estado de Pinochet hace 50 años. A continuación se puede subir al cerro de Santa Lucía, un icono histórico y cultural.

Bellavista y Yungay

El barrio de Bellavista alberga el parque más grande de la ciudad, el Metropolitano, situado en el cerro de San Cristóbal, al que se puede subir con un funicular. Asimismo, cuenta con teatros y hotspots culturales muy activos, como La Chascona, una de las casas donde vivió el escritor chileno Pablo Neruda.

Yungay, por su parte, es uno de los barrios más antiguos, donde se mezclan tabernas desvencijadas con viejos edificios art déco llenos de grafitis, construcciones modernas y locales de moda como el Squella, especializado en marisco. O la icónica Peluquería Francesa, que acaba de cumplir 155 años. Es el distrito preferido para bohemios y artistas, e incluso el joven presidente del país, Gabriel Boric, ha fijado su residencia. Precisamente aquí se encuentra el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, donde se muestra la barbarie de la dictadura de Augusto Pinochet.

Museos y centros recuperados transmiten la memoria histórica del país

Lastarria, París-Londres

Santiago de Chile cuenta con otras zonas de interés como Lastarria, que concentra una interesante oferta cultural con varios museos como el Nacional de las Bellas Artes, el de las Artes Visuales o el Centro Gabriela Mistral, además de un gran número de restaurantes y recoletos cafés.

Por su parte, París-Londres, ubicado en la confluencia de las calles del mismo nombre, es otro barrio emblemático de tan solo cuatro manzanas, caracterizado por un marcado estilo arquitectónico europeo con calles adoquinadas. En París-Londres también hay un espacio dedicado a preservar la memoria histórica. Se trata de Londres 38, que fue un centro clandestino de detención y torturas de la DINA, la policía secreta de Pinochet. Hoy es un sitio abierto a la comunidad que recuerda a las 98 personas (de las que se tiene constancia) que allí murieron y/o desparecieron.

Vitacura y Barrio Italia

El próspero barrio de Vitacura alberga el parque Bicentenario, donde hay un estanque con carpas koi y flamencos. La zona está salpicada de centros de arte contemporáneo y experimental, como la estupenda galería de arte Patricia Ready, y tiendas de lujo y de comida gurmet

Finalmente, el Barrio Italia es una de las zonas de moda. Recibe este nombre por los inmigrantes transalpinos que se instalaron entre 1880 y 1930. Acoge una amplia gama de oferta gastronómica, artística y cultural, además de un buen número de diseñadores, anticuarios y emprendedores. En el 2012 fue reconocido como Barrio del Diseño y, en el 2024, se inaugurará el curioso Museo del Sombrero.