Xavi, sobre la 'final' con el PSG: "Estoy excitado, es una oportunidad muy grande para el club"

Estaba este lunes por la mañana el Barça ya trabajando en el campo Tito Vilanova de la ciudad deportiva de Sant Joan Despí. Y entonces apareció, con traje oscuro y caminar tranquilo, Joan Laporta. Sabía el presidente que estaba en ese momento en el centro del escenario. Iba en solitario camino del encuentro de Xavi. Iba el dirigente atrayendo la mirada de los periodistas porque esa escena se produjo en el cuarto de hora inicial, justo cuando están las cámaras. Laporta se abrazó al técnico de forma cómplice y después se puso a charlar con él y su cuerpo técnico: Òscar Hernández, el segundo entrenador, y Sergio Alegre, el técnico.

Saludados todos, Laporta abandonó el césped tras visualizar el poderoso mensaje de unidad previo al partido más importante de la temporada. Hasta ahora, claro. Al partido que define el proyecto actual. Y, quien sabe, si de futuro del club. De ahí, que el presidente quisiera exhibir su abrazo a Xavi. Lo pudo hacer en la intimidad del vestuario de la ciudad deportiva. O incluso en el mismo césped, esperándolo antes del inicio de la última sesión del equipo. "Estoy feliz de verle, estamos excitados, se ha recuperado la ilusión, es una gran oportunidad para el club y para el barcelonismo”", ha precisado el técnico.

Laporta, con esa caminata, lenta, tranquila y confiada, de casi un minuto, ganaba tiempo hasta fundirse en el abrazo con el entrenador al que sostuvo en enero por ser quien era. "Una leyenda del club". Si Xavi hubiera sido un entrenador cualquiera llevaría casi tres meses en el paro. Pero resistió Laporta y el Barça se asoma a una semifinal de la Champions, hito no alcanzado desde 2019 con Bartomeu en el palco y Valverde en el banquillo, previo al escarnio de Anfield (4-0). "Volver a ver a los culés así ya es un éxito, pero el objetivo es pasar a semifinales y sería muy ilusionante", ha declarado Xavi.

"El presidente es el primer fanático, ha querido estar con el equipo para darle su apoyo y confianza. Viene cada dos por tres, tampoco es una novedad. Es una oportunidad muy grande para el club. Hemos recuperado la ilusión"

Xavi

— Técnico del Barça

Estaba feliz el técnico con la visita del presidente: “Es un culé más, me ha dicho que se quedaría en el rondo. El presidente es el primer fanático, ha querido estar con el equipo para darle su apoyo y confianza. Viene cada dos por tres, tampoco es una novedad. Es una oportunidad muy grande para el club. Hemos recuperado la ilusión”, ha comentado Xavi, calificando de “guerra futbolística” el duelo con el Paris SG.

"Estoy excitado para el partido de mañana, el barcelonismo, también. Las victorias te dan alivio y las derrotas, como dijo Ancelotti, no te dejan casi ni respirar. Estoy muy contento e ilusionado de estar aquí", ha precisado el técnico, indicando que "se ha liberado todo el mundo" tras su anuncio del adiós, efectuado en enero y ejecutado en junio. "Os preocupáis mucho por mí cuando hace tres meses no lo hacíais”, ha dicho a los periodistas. “Lo importante no soy yo, lo importante es que el equipo pase a semifinales. Creo que fue fenomenal que lo dijera"..

Más de 350 policías reforzarán la seguridad en el Barça-PSG por la alarma yihadista

"Controlar las emociones"

Por eso, nada más acabar el pasado miércoles en París el mejor partido nunca visto del Barça de Xavi en Europa (2-3 al PSG en el Parque de los Príncipes) llegó un mensaje de orgullo y de prudencia. Orgullo y prudencia del técnico, consciente de que “no todo está hecho”, asomándose este martes (21.00 h, Montjuïc) al encuentro más trascendente desde que aterrizó en el Camp Nou en noviembre de 2021. Es la noche que abre el camino a las semifinales de la Champions, lugar inhóspito en el último lustro para un club que ha sido desposeído de su grandeza europea.

“Es una oportunidad grande, pero tenemos que controlar las emociones, debemos demostrar la mejor cara y personalidad del equipo. El aspecto emocional es una de las claves del equipo”, ha insistido en varias ocasiones el técnico azulgrana. Y lo hace, además, el Barça en un estadio que no es el suyo.

"Laporta me ha dicho que se quería quedar en el rondo.... Es el primer fanático, lo siente, está emocionado; nos ha querido dar confianza. Viene cada dos por tres veces a darnos apoyo"

Xavi

— Técnico del Barça

En una casa, el Estadio Olímpico, en la que vive alquilado, donde como máximo cabrán 50.000 aficionados, la mitad de lo que acogía el viejo e imponente Camp Nou que asustaba nada más verlo. Y solo espantar el recuerdo del 6-1 (marzo 2017) agitaría aún más los demonios de un club, el PSG, que necesita la Champions para dar sentido a su megalomanía obra.

""Es un partido que se te queda grabado en la mente. No me lo creía cómo se había dado", ha dicho Xavi que vio ese 6-1 desde Doha. "Ojalá podamos dar otra alegría a los culés", ha añadido el entrenador del Barcelona.

"Esto va de futbolistas, no de entrenadores. Nos toca prepararles, guiarles y ayudarles para pasar a las semis. Se debe parecer el ambiente al del Camp Nou. Debe ser una caldera, todos tenemos que ser un equipo: afición, jugadores, todos…"

Xavi

— Técnico del Barça

"Esto va de futbolistas, no de entrenadores. Nos toca prepararles, guiarles y ayudarles para pasar a las semis”, ha dicho Xavi. “Se debe parecer el ambiente al del Camp Nou. Debe ser una caldera, todos tenemos que ser un equipo: afición, jugadores, todos… No es lo mismo, pero la afición seguro que hará que se parezca mucho”, ha comentado el entrenador azulgrana, convencido de que será "un partido intenso y nos van a presionar arriba".

Pasan los años en París, se gastan fortunas, cambian” entrenadores, compran estrellas de usar y tirar (Neymar) y el resultado es siempre el mismo: el vacío. Ni Messi, reunido con su amigo ‘Ney’ y Mbappé, obró el efecto deseado. “No he visto un partido de los equipos de Luis Enrique en los que no haya salido al ataque. Nunca especula, nunca”, ha reiterado el entrenador azulgrana.

Sin Christensen ni Sergi Roberto

Y ahora, Luis Enrique, el técnico del Barça del 6-1, tiene enfrente al mejor Barça de Xavi (13 partidos sin perder, 10 victorias, tres empates), ha ido derribando barreras desde que su ‘jefe’ decidió irse, claudicando ante la evidente presión externa y la invisible interna. Era cuando el equipo era transparente, agujereada como estaba la defensa por todos lados, sin un hilo que uniera todas las líneas.

Ahora, en cambio, Pau Cubarsí, un niño da orden y sentido a toda la zaga, Gündogan ejerce de líder silencioso, Lewandowski se siente como si estuviera aún en Múnich, y Raphinha percute al espacio, mientras Lamine Yamal desmiente, al igual que Pau, todas las teorías sobre la precocidad y el ingreso en el salvaje mundo profesional.

Es un Barça reconocible, con un acné juvenil que causa asombro en Europa, mientras la creatividad de Xavi como entrenador se ha visto favorecida por la liberación que ha sentido tras su adiós. Aunque tiene un asunto serio en la pizarra por resolver. No tendrá este martes a Christensen, el medio centro que se inventó en Vitoria con tan buen resultado. Ni tampoco a Sergi Roberto, a quien ha recuperado para la causa tras meses oscuros de lesiones. Ambos están sancionados.

La influencia de Luis, Guardiola y Luis Enrique

"Las bajas de Christensen y Sergi son muy sensibles. Las sanciones nos hacen daño. La clave para mañana es ser un equipo. Nos tenemos que dejar la piel y la vida para pasar a semifinales. Si somos un equipo tendremos números de pasar a semifinales”, ha reconocido el entrenador azulgrana recordando que “el PSG es uno de los mejores equipos del mundo", ha afirmadado Xavi.

Y al ser preguntado por los técnicos que más le han marcado, no tuvo duda alguna. "Quizá con Luis son ellos", ha dicho en alusión a Luis Aragonés, el hombre que le impulsó en la España que fue campeona de Europa en 2008, Pep Guardiola y Luis Enrique. "Quizá son los entrenadores que me han marcado más. Ahora, pensando como entrenador, me acuerdo de más cosas. Qué tengo que hacer aquí o allá, pienso en ellos. Me han marcado", ha dicho Xavi.