Alcaraz tras ser aplastado por Dimitrov en Miami: "Me hizo sentir como si tuviera 13 años"

Carlos Alcaraz, que se veía en pleno despegue tras su extraordinario éxito en Indian Wells, retomó las dudas en el momento más inesperado. El búlgaro Grigor Dimitrov le sometió a un severo correctivo la pasada madrugada en el Masters 1000 de Miami (6-2 y 6-4) para dejarlo fuera en los cuartos de final tras una hora y 32 minutos. El número dos del mundo, desorientado durante todo el partido e incapaz de encontrar una mínima respuesta al juego de su rival, no pudo esconder su frustración ante lo ocurrido: "Me hizo sentir como si tuviera 13 años".

Superado y minimizado por un Dimitrov que ya le había sometido en Shanghai el pasado mes de octubre -aunque no con semejante contudencia-, Alcaraz no pudo más que maquillar el ocaso. Cuando, eso sí, ya se veía a años luz del búlgar con un 6-2 y 4-1 que dejaba al murciano en muy mal lugar. La falta de contundencia y regularidad con su derecha, y los problemas con el servicio minaron la moral a Alcaraz, al que no le tocará otra que levantarse ahora que levantarse en la tierra batida de Montercarlo (10-16 de abril).

No quiso el tenista murciano, en cualquier caso, fustigarse. O, al menos, procuró centrarse en la mejoría mostrada cuando ya se despeñaba: "Dejé la pista pensando que quizá hubiera tenido que cambiar mi juego un poco antes. Pero creo que jugué bien. No perfecto, eso sí, pero bien", se arrancó Alcaraz, que procuró cargar de méritos a Dimitrov (32 años y número 12 del mundo): "Siento mucha frustración. Fue una locura. Hablaba con los miembros de mi equipo -Juan Carlos Ferrero, su entrenador, no fue capaz de sacar su pupilo del caos- y decía que no sabía qué hacer. No sabía acerca de sus debilidades. No pude encontrar soluciones, tampoco una manera de hacerle sentir incómodo. Cuando mire las estadística sveré si le dan [a Dimitrov] un 10 de 10. O un 9,9", abundó Alcaraz, para zanjar: "Si Grigor juega de esta forma, va a ser muy complicado medirse con él".

Las nueve victorias consecutivas de Alcaraz concluyen de manera abrupta. Mientras, Daniil Medvedev y Jannik Sinner, por un lado, y el propio Dimitrov y Alexander Zverev, por el otro lado del cuadro, tratarán de hacerse con el triunfo final de Miami, el mismo lugar donde el murciano salió victorioso en 2022.