El vestuario y la televisión del Real Madrid callan ante el escándalo contra el Almería

El silencio del Real Madrid contrasta con el ruido atronador que envuelve a todo lo ocurrido en el partido ante el Almería y las visitas de Hernández Maeso al VAR para atender las llamadas de Hernández Hernández, uno de los árbitros considerados "antimadridstas" por el aparato propagandístico del club, su canal oficial, que le dedicó uno de sus controvertidos vídeos. 

Una vez más la única declaración más o menos institucional al respecto de la entidad blanca es la que realizó Carlo Ancelotti, que se manifestó en rueda de prensa admitiendo el revuelo al declarar: "Entiendo el enfado del Almería. Lo entiendo perfectamente". Aunque después añadió su particular visión de las jugadas polémicas: "Creo que las tres han sido decisiones bastante claras". El vestuario blanco da la callada por respuesta y desde el palco se mira a otro lado. No hay previsto ningún posicionamiento al respecto. Lo que sí llama la atención es el mensaje que algunos periodistas están desplegando en los medios sobre el daño reputacional que genera este escándalo al Real Madrid como entidad. Pero ninguno ha comentado el bochorno del proceder de su canal de televisión oficial señalando a los árbitros en la caza de brujas iniciada por Real Madrid Televisión.

El VAR regala al Real Madrid una remontada ante el colista Almería

Tres polémicas, una certeza y "veintipico cámaras"

Y es ahí donde chirría todo. En la primera jugada, en la que Hernández Maeso señala penalti del brasileño Kaiky, la mano es tan involuntaria como clara, tanto o menos que la falta que realiza en la misma acción Rudiger saltando apoyado en un defensa del Almería. Algo que Hernánddez Hernández no entró a valorar en el VAR pese a la incidencia que tenía en la jugada. 

En el segundo se anula un gol de Sergio Arribas por una falta previa del senegalés Dion Lopy a Jude Bellingham en el inicio de la jugada. Aquí no hay dudas sobre la falta, lo que llama poderosamente la atención es que Hernández Maeso, que está a metro y medio del lance entre Lopy y Bellingham no lo señale, pese a ver con notoriedad que el defensa llega tarde y pisa al inglés. Esto es lo que más sorprende en una jugada que ofrece pocas dudas. 

Mientras que en la última, en la que se valida finalmente el gol del brasileño Vinicius cuando en directo el árbitro había señalado mano en directo. Extraña en primer lugar que se cambie la decisión cuando se trata de una jugada de interpretación del colegiado y además no existe ninguna toma en la que quede claro si el balón le golpea en el hombro o en el brazo. Algo que extrañó al mismísimo Jaume Roures, fundador de Mediapro, empresa con la que la RFEF tiene firmado un contrato para el VAR, que apuntó: "Yo lo que quiero subrayar es que las imágenes del gol de Vinicius, en las que se puede ver que le ha dado en el brazo y no hay discusión, eran tomas malas. La repetición desde una toma frontal deja claro que lo ha metido con el brazo".

El propio Roures comentaba que "en un partido del Real Madrid debe haber unas veintialgo cámaras. Se mandan las imágenes de todas las cámaras. Luego, el VAR, los operadores que se ven en la pantalla y los árbitros deciden cómo las utilizan. Se mandan todas las señales en directo. No hay edición. Tal y como todas las cámaras van captando imágenes, esas imágenes llegan al VAR". 

Los audios del VAR no arrojan mucha luz sobre el asunto, más allá de las interpretaciones que hace de las jugadas Hernández Hernández, uno de los árbitros a los que Real Madrid TV dedicó un vídeo por sus decisiones "antimadridistas". Condición que ahora queda en entredicha tras este arbitraje amable y sus intervenciones en el partido asesorando a un Hernández Maeso que pitaba su primer partido al Real Madrid. 

¿Así gana el Madrid? y las conspiraciones

El escándalo ha tenido tremenda difusión en los medios, siendo los andaluces y almerienses los más incisivos. En el 'Diario de Almería' su jefe de deportes, Paco Gregorio apuntaba en su crónica: "El Almería fue víctima en el Santiago Bernabéu de uno de los mayores atracos arbitrales que se recuerdan, y eso que en el templo blanco ha habido unos cuantos. El honesto partido que estaban cuajando los de Garitano fue cortado de raíz por el equipo arbitral desde la sala VOR, interpretando torticeramente todas las acciones en contra de los intereses indálicos (...) Todo ello con un descuento de 13 minutos para facilitar el 3-2 final de Carvajal. En la versión de papel el titular que ilustraba la foto del partido era "Un señor mangazo", con el subtítulo "Un humilde pero orgulloso Almería es atracado a mano armada en el Bernabéu".

Mientras el diario Ideal preguntaba: "¿Así gana el Madrid?", afirmando después que "El Almería sufre el atraco más grande de su historia, con dos goles en contra ‘marcados’ por el VAR y el 1-3 anulado también por el VAR; el descuento, premeditado, hasta que llegara el 3-2 (...) De vergüenza, para haber abandonado el terreno de juego cuando Hernández Maeso ‘decretó’ que el ganador en el Bernabéu no iba a ser otro equipo que el dueño del lugar donde se jugaba el partido".

La jornada concluyó con los ecos de las declaraciones sobre lo ocurrido desde Sevilla de Xavi Hernández, entrenador del Barcelona, que ha pagado durante 18 años más de 7,5 millones de euros al vicepresidente de los árbitros para "influir" en los arbitrajes. "Va a ser muy difícil ganar esta Liga. Hay cosas que no me cuadran. Lo del Bernabéu lo ha visto todo el mundo. De todas formas seguiremos luchando". 

El desastroso arbitraje de Hernández Maeso y la obtusa utilización del VAR en los partidos sigue alimentando este ambiente conspiranoico en el que se mueve el fútbol desde hace tiempo. Algo a lo que contribuyen interesadamente los llamados equipos 'grandes' metiendo más presión ya sea con los pagos a Enríquez Negreira del Barça, los vídeos de Real Madrid Televisión señalando a árbitros puntuales o los comunicados del Atlético contra los colegiados. Casualmente, los tres equipos con más poder y peso frente al resto de clubes que asumen con resignación los atropellos que sufren ante los tres portaviones de la Liga.