No maten al mensajero por Sergi Mas

Resulta curioso el contraste del desarrollo -antipático e incómodo- de ésta competición para un equipo grande como el nuestro durante las primeras rondas, jugando en campos impropios para disputar un partido que honre a esta competición centenaria (¿vieron el estado del césped artificial en Vic dónde jugaron Badalona Futur y Cádiz?), frente a tono ilusionante y emotivo de los cuartos, las semis... y porqué no, la final. 

Por eso digo que esa disparidad de criterios a medida que avanza la temporada me llama la atención. Por eso hay entrenadores a los que se les escucha decir: "La Copa molesta". Eso no lo dicen en las semis. ¿Saben quién, hace años, pronunció esta frase? No lo dirían nunca: Ernesto Valverde, uno di noi. La pronunció antes de un copero Espanyol-Rayo. Pero la Copa es NUESTRA competición.

Un partido tonto

Siempre hay un partido tonto durante la temporada. El problema es que ya hemos tenido algunos... Pero imagínense que el equipo tropieza en Canarias y cae de la Copa. Buenoooo. ¡Pobre Luis! La que le hubiera caído...  Ya hubieran sonado futuribles al banquillo, ultimátums sin base alguna a través de redes sociales, encuestas desde la nada, preguntas en ruedas de prensa con el inicio "Mister, ¿Te ves capacitado para...?". En fin.

No alarguemos el ovillo del rumor porque esto no ha pasado. Toca el Eibar. Este viernes a las 21.00 h. ¿Qué raro, no? Miren: mejor tomárselo a cachondeo porque de lo contrario, nos acabará dando un "parraque" Victoria en Canarias, 0-2 y cap a casa.

Recordemos que no es obligatorio hacer un partido brillante para pasar de ronda, que hay que ser más ejecutor, más frío, no queramos ahora ganar 0-7 imitando a Brasil-70. Eso lo haremos cuando tengamos mucho dinero, o sea nunca. Porque esta industria va de dinero: si lo tienes, fichas a un tío que te haga un pase a 40 metros y al pie; si no tienes pasta, date por jodido.

Recuerden: no maten al Mensajero. Puede ser el inicio de una gran alegría cuando durmamos sin funda nórdica, en el mes de mayo, en la final.

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