DUDOSO PARA EL CLÁSICO CON EL MADRID

Lewandowski no jugará el Granada-Barça y peligra para el clásico (28 de octubre)

El Barça se recupera en defensa: el cero en la portería son seis puntos

El Barça gana muerto de miedo

Lewandowski se duele tras el golpe que recibió por encima del tobillo izquierdo en el Oporto-Barça.

Lewandowski se duele tras el golpe que recibió por encima del tobillo izquierdo en el Oporto-Barça. / Afp

Marcos López

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Recibió una dura entrada de David Carmo, el corpulento (mide 1.96 m) defensa portugués. Pero Taylor, el colegiado inglés, no apreció ni falta en esa acción sobre Robert Lewandowski, que se vio obligado a pedir el cambio durante el Oporto-Barça. Intentó el delantero polaco seguir en el campo. Pero no pudo. Y las primeras informaciones indicaban, tras ser explorado por los médicos del Barça, que no era una lesión importante.

Una vez en Barcelona, después de un examen más preciso, se le diagnosticó a Lewandowski un esguince en el tobillo izquierdo. No quiso definir el club el grado de gravedad de ese esguince, más allá de que le impedirá participar en el próximo encuentro. Pero, además de estar descartado para el Granada-Barça del domingo (21 h.), corre serio peligro de perderse el clásico del 28 de octubre.

El partido antes el Granada es el último antes del parón de selecciones. Lewandowski está convocado pero no irá ante la imposibilidad de jugar. Lesionado también Raphinha, solo quedan Lamine Yamal, Ferran y João Félix como delanteros natos, además de Fermín López para visitar al Granada y recibir al Athletic (22 de octubre) y al Shakhtar Donetz (día 25). Si se confirma la ausencia de Lewandowski, el problema actual de Xavise alargaría cuatro partidos, ya que tampoco están disponibles Pedri (lesionado desde agosto), Frenkie de Jong y Raphinha.

Cojera evidente

Lewandowski se marchó del césped de Do Dragão cojeando ostensiblemente. Entró Ferran Torres en el campo, mientras él se marchaba al banquillo y luego a los vestuarios donde fue examinado por Ricard Pruna, el médico del Barça.

Allí, según las informaciones, se detectó que había sufrido un fuerte golpe, y ese golpe forzó un esguince de ligamentos. No había entrado Lewandowski en el partido. Apenas había tenido peso, desconectado como estaba del juego azulgrana. Jugó 34 minutos y no realizó ni un solo disparo. Apenas tocó seis balones en esa media hora de partido antes de recibir la dura entrada de Carmo.