Jueves, 18.00 horas

Sorteo de la Champions 2023-24: Europa, frontera maldita para el Barça

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Xavi Hernández presenta su campus de verano para niños en Barcelona.

Xavi Hernández presenta su campus de verano para niños en Barcelona. / Efe

Marcos López / Raúl Paniagua

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Wembley, aquel viejo y ya derruído estadio con dos imponentes torres que presidían su entrada, evoca el origen. La obra cumbre del ‘Dream Team’ de Johan Cruyff en 1992, prólogo de la mejor época de la historia del Barça. Wembley, ese ultramoderno y hermoso templo londinense, construido sobre las ruínas del antiguo, evoca a la perfección. El Barça de Guardiola (2011) o la final perfecta ante el atemorizado y triste United de Sir Álex Ferguson. Y Wembley, siempre Wembley, emerge ahora en el horizonte azulgrana para acoger el próximo 1 de junio la final de la Champions-2024, colocando al Barça de Xavi ante una frontera maldita.

Más que una frontera, es un tormento porque el equipo, que conocerá esta tarde sus rivales en el sorteo que se realizará en Mónaco (18.00 horas), ha ido encadenando drama tras drama en el continente. A cada cual, más doloroso e insoportable. Por mucho que le pese es el Barça un equipo menor en Europa.

Alejado de la élite

Le mantiene su nombre y grandeza, pero el paso de los años lo ha alejado de la élite de tal manera que ha vivido una sucesión de inacabables caídas, certificadas y, tal vez, resumidas todas ellas, en aquel 2-8 de Lisboa que le propinó el Bayern Múnich. Antes, ocurrió en Roma, luego en Anfield... Poco importaban los entrenadores (Valverde, Setién, Koeman y en las dos últimas temporadas hasta Xavi ha sido alcanzado por esa maldición de la Champions ) e incluso los jugadores (no alcanzaba con Messi y mucho menos aún sin Leo). 

Pasan los entrenadores y los jugadores. Nada cambia en el Barça. No alcanzaba ya con Messi. Mucho menos aún sin Leo

Se ha empequeñecido tanto el Barça cada vez que abandona España que su último título europeo data de hace casi una década. Ocurrió en el 2015 cuando el tridente (Messi-Neymar-Suárez) no solo le dio la quinta y última Champions en Berlín (dos de ellas en Wembley, otra en París y otra en Roma) sino que mantuvo ene el cargo a Josep Maria Bartomeu.

Messi, Neymar y Suárez celebran un gol azulgrana.

Messi, Neymar y Suárez celebran un gol azulgrana. / .

El tridente llevó al equipo de Luis Enrique al triplete y al dirigente a arrasar en unas elecciones en las que Laporta, ahora presidente, fue una figura decorativa. No se sabía entonces. Pero Berlín fue la cima y el principio del fin porque Bartomeu forzó antes la salida de Zubizarreta, autor del cambio de 2014, de la dirección deportiva y el Barça entró en un derroche descontrolado de dinero (Dembélé, Coutinho y Griezmann), que ahora paga con la miseria más absoluta.

Dos españoles en el bombo 1

La corona conquistada en la Liga le otorga al equipo de Xavi de quedar ubicado en el bombo 1, allí donde habita el campeón: el Manchester City de Guardiola. También hay otro club español. Es el Sevilla, quien entró por la vía más inesperada al conquistar la Europa League en un arrebato de furia futbolística coordinada con el sentido común que inyectó Mendílibar, ahora bajo sospecha en el Sánchez Pizjuán por un horrible inicio de Liga: tres partidos, tres derrotas, 0 puntos de nueve. Colista del campeonato. Ni más, ni menos.

Pep Guardiola celebra la Champions conseguida con el Manchester City en Estambul.

Pep Guardiola celebra la Champions conseguida con el Manchester City en Estambul. / Martin Divisek

El Nápoles sin Spalletti (Italia), el Bayern Múnich con Kane (Alemania), el Paris SG de Luis Enrique (Francia), con Mbappé, pero sin Messi y Neymar, el Benfica (Portugal) y el Feyenoord (Países Bajos) completan ese grupo que mira desde arriba al resto de los clubs europeos.

El Madrid, sin los lesionados Courtois, Militao y Vinicius, y sin Benzema, ya fue destronado el curso pasado por el City, por lo que ha sido confinado al bombo dos donde se encuentra también el Atlético, a quien Simeone está hallando una nueva filosofía futbolística. Ahí están, por ejemplo, rivales duros que podrían tocar al Barça como Arsenal, United, Inter, finalista en Estambul y que lo eliminó hace unos meses, o Dortmund.

"No somos favoritos"

La atrevida Real Sociedad de Imanol Alguacil vuelve a la aristocracia continental una década más tarde, situada en el bombo 4 de un sorteo que puede determinar la temporada. Y si no que se lo pregunten al propropio Xavi, quien al caer emparejado la pasada campaña con Bayern, Inter y Viktoria Pilsen lo calificó como "el grupo de la muerte". No se equivocó porque acabó eliminado, incapaz de pasar la primera fase, como ya ocurrió en la temporada 2021-22.

"Debemos ser más competitivos en Europa. Tenemos que dar un salto de calidad en la Champions. Favoritos no somos, pero el objetivo es ganarla"

Xavi

— Técnico del Barça

La fortuna volverá a ser clave en un sorteo que puede llevar a los azulgranas a otro grupo letal con United, Milan y Unión Berlín; o Dortmund, Milan y Newcastle. Mucho más sencillo sería un cruce con Oporto, Estrella Roja y Lens, por citar unos ejemplos. 

El listón, "en lo más alto"

Xavi, mejor que nadie, sabe a lo que se enfrenta. Necesita, una vez conquistada la Liga, que su equipo ofrezca un nivel digno en Europa. En caso contrario, el ambiente se envenenaría. "Debemos ser más competitivos en Europa. Tenemos que dar un salto de calidad en la Champions. Favoritos no somos, pero el objetivo es ganarla", ha insistido el técnico a lo largo de este verano.

"No hay que esconderse, aquí no hay octavos ni cuartos. Hay que ponerse el listón en lo más alto". Si no lo supera, el tormento se hará insostenible para un Barça que hace años que se quedó sin voz en Europa. Ni se le ve.