El VAR de los líos: los clubs se rebelan en España

La quinta temporada del VAR entra en su recta final y no puede decirse, precisamente, que hayan mejorado mucho las cosas respecto a los comienzos. Cada jornada emergen las críticas de jugadores y entrenadores contra una tecnología que se implantó para solucionar errores flagrantes y corregir injusticias, pero al final ha comportado más confusión y quejas por los agravios comparativos en su uso. Antes, el error se asociaba más al azar; ahora, la presencia de la tecnología incrementa el enfado. Al final, la realidad acaba siendo tan obvia como siempre: los perdedores se quejan y los ganadores callan.

El gol anulado al Madrid en el último clásico de la Liga fue quizá el episodio más comentado de la polémica. "Me quedo con la duda. Seguro no hay nada, tenemos derecho a dudar", soltó entonces Carlo Ancelotti. No hay que irse tan lejos para encontrar casos realmente injustos, como los de esta última jornada, que propiciaron los comunicados de repulsa del Sevilla y el Espanyol. Antes ya se quejaron oficialmente el Cádiz y el Atlético.

"El puñetero VAR"

El club sevillista estalló por la expulsión de Pape Gueye en el minuto 18. El árbitro no se percató del pisotón involuntario sobre Aspas. Le informó un asistente y le acabó echando al mostrarle la segunda amarilla. "La Premier tiene 28 expulsados y aquí, la mejor Liga del mundo, llevamos más de 100. Algo está fallando", reflexionó Fernando. "Son dos gilipolleces. Es el puñetero VAR, que hace peores a los árbitros", estalló el técnico Mendilibar. El día siguiente se pasó por alto una entrada de Tchouaméni sobre Chukwueze que pudo suponer perfectamente la roja.

El Sevilla emitió el sábado un comunicado expresando "el más absoluto rechazo" a las decisiones arbitrales. El club lamenta "la falta de criterio" y critica la "indignante permisividad con unos y la mano dura con otros".

Horas después, el Espanyol también se indignó por el gol anulado a Braithwaite tras una mano de Joselu que advirtió el VAR, mientras se perdonaba la segunda amarilla a Dani García, pivote del Athletic. Tampoco se cortó la entidad blanquiazul, que denunció en su nota "la disparidad de criterios arbitrales" al revisar las jugadas. El club perico detalló un listado de jugadas en las que se ha sentido perjudicado.

La ira de Iraola

La jornada anterior también se cerró con otro enfado monumental tras el penalti a favor del Valencia señalado ante el Rayo. El árbitro no vio nada hasta que que el VAR le avisó, cosa que no hizo ninguna gracia a Iraola, el técnico del equipo de Vallecas. "Me parece increíble. Yo me estoy jugando lo mismo que el Valencia. Ya nos pasó en Girona... En fin, no quiero meterme en fregaos. En dos días nadie se acordará de lo que ha pasado, pero tenemos dos puntos menos".

La polémica no sorprende a los árbitros más veteranos. Así ha sido toda la vida. "Yo no tengo ni puñetera idea. No sé nada del fútbol moderno, estoy en otro mundo", suelta Andújar Oliver al ser cuestionado por el videoarbitraje en una charla con EL PERIÓDICO. Poco a poco se quita la coraza. "Me habría encantado tener el VAR en mi época. Cuantas más ayudas tengas en tu trabajo siempre será beneficioso. Bienvenida sea la tecnología, es buena para todo. El problema es otro", asegura el excolegiado, que dispara hacia otros actores.

"El que gana calla, el que pierde mete jaleo. Tiramos 50 años atrás y no se ha avanzado nada"

— Andújar Oliver / Exárbitro

"El que gana calla, el que pierde mete jaleo. Tiramos 50 años atrás y no se ha avanzado nada. La fiesta siempre acaba igual: el que toma las decisiones es el culpable de todo". Según el andaluz, el escándalo se monta casi siempre con los dos grandes. "Es una vergüenza, pero no es algo nuevo de este año. Es una mentira centrarse solo en el VAR. El que gana un campeonato es porque es mejor y el que pierde es porque es peor. Lo demás es querer engañar a la afición y a todo el mundo".

"Una puta barbaridad"

Uno de los más perjudicados del curso ha sido el Cádiz, que llegó a pedir la suspensión de la Liga mientras no se resolviera el recurso presentado por el grave error del 17 de enero, cuando se dio validez a un gol del Elche en claro fuera de juego. Del Cerro Grande pidió disculpas, pero el duelo acabó en empate. Es el error más garrafal en lo que va de campeonato.

El VAR revisó una posible falta, pero no la posición ilegal, lo que encendió a Sergio González, que también se ha indignado con otras decisiones, como el penalti decretado en el último minuto 100 ante el Getafe por unas manos del Pacha Espino. "Que añadan 10 minutos es una puta barbaridad. Quiero mandar un mensaje al estamento arbitral y que se pongan las pilas porque todos nos estamos jugando mucho", dijo el técnico. Este domingo tuvo más fortuna en el campo del Betis.

El drama de las manos

Otro extécnico perico, como Ernesto Valverde, también estalló hace semanas con el gol anulado a Iñaki Williams ante el Barça por mano previa de Muniain. "El VAR nos aleja del fútbol real que todos conocemos. Supongo que hay alguien con una mira telescópica que está observando exactamente si le roza el balón en un sitio o en otro", apuntó el preparador.

"El VAR nos aleja del fútbol real que todos conocemos"

— Ernesto Valverde / Entrenador del Athletic

Las manos generan muchas de las polémicas. Nunca se sabe con exactitud cuando se actúa o no, si es penalti o es una acción involuntaria. El fútbol deja de verse en movimiento. Se paran las imágenes y todo se desvirtúa. "El árbitro de campo debe tener más protagonismo. En el protocolo pone que se debe entrar en caso de error obvio, claro y manifiesto, pero hay muchas interpretables", apunta el excolegiado Pérez Burrull, que lamenta que muchas veces se reduzca todo "a una foto para reclamar o valorar".

Seguir creyendo

Jagoba Arrasate, técnico de Osasuna, también ha dejado reflexiones interesantes hace un mes tras caer en Mestalla. Iglesias Villanueva expulsó a Sergio Herrera y Aimar Oroz con rojas directas que anuló tras ir al monitor. También, tras la revisión del VAR, señaló un penalti a favor del Valencia y no indicó otro que parecía más claro. También le molestó la diferencia de criterio al validarse un gol del Madrid con Rudiger en fuera de juego molestando al meta navarro y anularse un tanto de Abde contra el Celta por posición ilegal del Chimy en un contexto similar.

"El árbitro de campo debe tener más protagonismo. No se puede reducir todo a una foto para reclamar o valorar"

— Pérez Burrull / Exárbitro

"Queremos calmarnos, bajar las pulsaciones, entender ciertas cosas, pero a mí se me hace muy difícil seguir creyendo en esto", reflexionó el técnico de Osasuna. Ofuscado se mostró también Rubén Baraja, que lucha por sacar al Valencia del descenso. El técnico alucinó al pasar por alto el VAR el penalti de Kessié a Fran Pérez en el Camp Nou. "Hay contacto, me ha sorprendido que el árbitro no fuera a verlo. Ha sido muy rápida la decisión de pitar córner".

Récord de expulsiones

Las expulsiones se han multiplicado en este curso. En la Liga se han mostrado ya 113 tarjetas rojas en 28 jornadas, una cifra bestial si se tiene en cuenta que la pasada temporada hubo 89. En la Premier no se han producido ni una cuarta parte. El Betis, con 12 rojas, incluidas las de este domingo de Canales y Ruibal, comanda un ranking que cierra el Madrid, con solo un expulsado.

Los técnicos lamentan estos datos y coinciden en que "el fútbol es un deporte de contacto", como también soltó el pasado verano Medina Cantalejo, el presidente del Comité Técnico de Árbitros, que abogó por el final de los "penaltitos", cosa que tampoco se ha cumplido.

Para la próxima campaña ya se esperan novedades. La federación ha publicado las bases del concurso para la presentación del servicio para las próximas tres temporadas, desde la 2023-24 a la 2026-27, con la posible inclusión del fuera de juego semiautomático. El VAR también llegará a la Liga femenina si los clubs lo consideran necesario. Por ahora sigue fuera el Ojo del Halcón, que sí se utiliza en la Premier, la Bundesliga y la Champions.

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