Mechaal se apunta al desafío ante Ingebrigtsen en la esperada final de 3.000

Llora Xenia Benach tras su insuficiente quinto puesto para pasar a la siguiente ronda de 60 vallas. Llora Fátima Diame por cuatro centímetros para estar en la final de salto de longitud. Llora Lorea Ibarzabal tras su brillante calificación en 800 al recordar a su amiga Bea que acaba de fallecer, con quien corría hace tan solo cuatro meses. Javier Ureña no llora pero se nota flojo y vacío en cada prueba, afirma, y no sabe por qué. Llora al completo el equipo nacional por la ausencia del fisioterapeuta Ángel Basas, fallecido junto a su hijo en un accidente de tráfico en Nueva Zelanda en la semana anterior al Europeo.

Basas llevaba tres décadas cuidando del dique seco al que van a parar y recuperarse la élite española lesionada, la peor de las situaciones para un atleta profesional. La puerta de su taller estaba siempre abierta. Su pérdida sin duda ha supuesto un duro golpe para el equipo nacional, en el que era muy querido.

La jornada del sábado tampoco acabó con el cero en el medallero de España, aunque también proporcionó buenas noticias. De buena mañana, Adel Mechaal se metió cómodamente en la final de 3.000 de hoy (18.00 horas) que disputará como rival con más posibilidades frente al intratable noruego Jakob Ingebrigtsen, que busca su segundo oro tras ganar el viernes el 1.500.

En 800, la madrileña nacida en Las Palmas Lorea Ibarzabal alcanzó la final que se disputa esta tarde (18.35), en su debut con la selección española, a los 28 años y tras superar un desierto de lesiones. Adrian Ben a continuación ganó su semifinal y el olímpico gallego también disputará una final de 800 (18.22) en la que apunta posibilidades, tras superar una factura de fémur por estrés que le mantuvo en recuperación durante 11 meses en plena pandemia.

Otro paso más de Guerrero

Sexta en Belgrado 2017, el mismo resultado dos años después en Glasgow, y quinta en Torun 2021, Esther Guerrero se acercó un poco más al podio al entrar en cuarta posición en la final de 1.500 con marca personal incluida (4.04.86), mientras la espontánea Ágeda Marqués alcanzaba un puesto de finalista al ser séptima y mejoraba también su registro (4.08.72). Guerrero se perdió el Mundial de Belgrado en 2022 por una lesión.

Faltaba la final de 400 lisos. Con cuatro medallas continentales y el título bajo techo en Torun 2021, Husillos se enfrentaba al plusmarquista mundial de 400 vallas, el noruego Karsten Warholm, con un registro con vallas de 45.94 segundos. Como sucede con Jakob Ingebrigtsen, Warholm es otro noruego con vitola de imbatible, salvo error o incidente durante una carrera corta, rápida y por calle libre en la segunda vuelta. El vallista imprimió un ritmo láctico desde la salida y acabó tirándose sobre la linea de meta ante el acoso del belga Julien Watrin para asegurar el título (45.35 segundos). Husillos no pudo seguir su estela ni disputar las medallas en la recta final, sumando otro cuarto puesto (con 46.24) para España.

La holandesa Femke Bol cumplió todos los pronósticos y ganó la final de 400 corriendo sola por debajo de los 50 segundos. En la final más corta y rápida, los 60 metros, el campeón olímpico de 100 metros, el italiano Marcel Jacobs, cedió ante su compatriota Samule Ceccarelli, ganador con 6.48 segundos.